Enric Gallego marca lejos del Rodríguez López casi dos años después

El ariete barcelonés no anotaba lejos de la Isla desde el 4 de junio de 2022

Fue en la vuelta del 'playoff' frente a Las Palmas, cuando lo hizo por partida doble

Enric Gallego celebra su gol de penalti frente al Burgos

Enric Gallego celebra su gol de penalti frente al Burgos / Agencia LOF

Tuvo que ser de penalti. Y ni siquiera a la primera, sino a la segunda tras una sorprendente intervención del VAR. Enric Gallego volvió a anotar un gol fuera de casa. Lo hizo casi dos años después. 

Corría el minuto 23 de partido en El Plantío. Burgos y Tenerife empataban a cero en un partido al que los insulares no habían entrado bien –para no variar– y en el que el equipo de Bolo había gozado de dos ocasiones muy claras. Fue entonces cuando Roberto López cedió atrás un balón y Sergio González se anticipó a Mumo, que no vio llegar al mediocentro tinterfeñista. Sergio tocó la pelota y el jugador local ya no la pudo despejar. Lo que golpeó fue la pierna del atacante. Penalti muy claro que Caparrós Hernández no dudó en señalar. Se preparó Enric, besó el balón, lo posó en la hierba y tomó carrerilla. A su izquierda, la derecha de Caro, a media altura y falto de potencia. El guardameta desvió sin demasiado esfuerzo y un compañero suyo alejó el balón del área justo después.

Tampoco iba a ser en El Plantío. O eso parecía hasta que el colegiado se echó la mano a la oreja. Por el pinganillo, desde la sala VOR, le explicaban que el zaguero local que había intervenido tras la parada de Caro invadió el área antes de que Gallego golpeara. Reglamento en mano, había que repetir. 

Ahora sí, en medio de un tremendo enfado burgalés, Enric asumió de nuevo la responsabilidad. Lanzó arriba, esta vez a su derecha y, esta vez, más ajustado y con potencia. Caro volvió a adivinar la trayectoria, aunque nada pudo hacer. Habían pasado casi cinco minutos desde la infracción de Mumo. 

Las Palmas, su última víctima

Fin a la racha, a la mala racha. Gallego respiró aliviado y celebró el tanto con más rabia que alegría. No marcaba fuera del Rodríguez López desde el 4 de junio de 2022. Faltaban solo nueve días para que se cumplieran dos años. Lo había hecho, por última vez, en la vuelta de las semifinales del playoff de ascenso y frente a la Unión Deportiva Las Palmas. Aquella tarde, en el Estadio de Gran Canaria, Gallego anotó por partida doble. Lo hizo a los cuatro minutos de juego cuando aprovechó una mala salida de Álvaro Valles y, también en el 51 (en el seis de añadido de la primera mitad), precisamente desde el punto de penalti. 

Desde entonces, el ariete barcelonés había dispuesto de 36 oportunidades para volver a perforar la portería rival lejos del recinto capitalino. Todas fallidas. Por el camino, una temporada para la frustración, la 22/23, y una segunda, la actual, en la que el ex de Osasuna aprovechó la última oportunidad de la que dispuso. De esos 36 partidos, 33 habían sido de Liga y tres en de Copa del Rey. 

Gallego, de paso, volvió a marcar después de cerca de tres meses de sequía. Su último tanto, también desde el punto de castigo, lo había hecho en la visita del Mirandés al Heliodoro el 3 de marzo. 

No obstante, su temporada, con seis goles a falta de la última jornada ante el Valladolid, deja otro detalle preocupante: cuatro de sus tantos han sido de penalti, casi el 67%. No anota de jugada desde el 25 de septiembre. Han pasado más de ocho meses. Demasiado tiempo para un atacante que cumplirá 38 años en este 2024 y que afronta, en la próxima temporada, su último año de contrato con la entidad blanquiazul.