CD Tenerife

Asier Garitano se ofrece para seguir siendo el entrenador del CD Tenerife la próxima temporada

El técnico vasco intenta convencer al máximo accionista de que es la mejor opción para liderar el proyecto de la próxima temporada

Fue acompañado por Mauro Pérez a la capital de España en el día libre del primer equipo y ambos volvieron unas horas más tarde

Asier Garitano, entrenador del CD Tenerife.

Asier Garitano, entrenador del CD Tenerife. / El Día

Manoj Daswani

Manoj Daswani

Nueva cumbre a tres. Mauro Pérez y Asier Garitano se desplazaron en la mañana de este lunes a la capital de España para mantener un encuentro con José Miguel Garrido, máximo accionista de la sociedad. La intención era evaluar la temporada y emitir un juicio respecto a lo ya ocurrido en el curso 23/24. Aún así, el profesional vasco aprovechó para venderse como mejor opción posible para la campaña venidera. Cree que este curso le ha valido de aprendizaje y se muestra dispuesto a aprovechar una eventual segunda oportunidad para dirigir al representativo.

Varias fuentes consultadas por EL DÍA confirman esta reunión, la segunda en apenas tres semanas. La anterior había tenido lugar en el hotel Mencey de Santa Cruz "de una manera informal", reconoció el propio técnico después de que trascendiera aquel cónclave que valió para intercambiar impresiones cuando aún quedaban cuatro jornadas por disputarse y el Tenerife conservaba opciones matemáticas de jugar la promoción. Ahora quedan solo dos y el cuadro blanquiazul ya no tiene posibilidades ni de alcanzar la octava plaza.

Para esta nueva cumbre, Garitano acudió acompañado de Mauro Pérez. Ambos fueron y volvieron en el mismo avión (en Iberia Express) aprovechando el día libre de la primera plantilla blanquiazul.

La intención era hacer una evaluación detallada de la temporada aún vigente y hacer un veredicto respecto a lo acontecido en los 40 partidos ya jugados, el último de ellos con una sonrojante derrota ante el Amorebieta: 0-1 en el Heliodoro.

Asier Garitano intentó convencer a Garrido y Mauro de que él es la mejor opción posible para la temporada 2024/25. El técnico vasco cree que con algunos retoques (y no solo en la plantilla de jugadores) sería capaz de obtener mejores resultados si le conceden una segunda oportunidad al frente de las operaciones.

En el club consideran que está aferrándose a la opción de seguir como un náufrago a un flotador, a sabiendas de que ésta puede ser su última bala en el fútbol profesional y que, tras el fiasco de esta campaña con todo casi a favor, difícilmente volverá a ser llamado por otro equipo de LaLiga a corto plazo en circunstancias semejantes.

Asier sale de esta reunión prácticamente sentenciado y con la única esperanza de que fracasen todas las demás vías abiertas para la contratación de un entrenador. Prácticamente nadie en el club confía en que sea la apuesta idónea. Desde el consejo de administración varias voces consultadas por este periódico dan por amortizada la etapa Asier y se centran en acabar de la mejor manera posible. Además, creen que su continuidad sería un tiro en el pie para la venidera campaña de abonados, para intentar relanzar la ilusión colectiva y para el propio vestuario, donde el mensaje del vasco no llega.

Imagen de la reunión del Mencey.

Imagen de la reunión del Mencey. / El Día

El naufragio del sábado

Hasta el momento, Garrido ha sido el único que ha alimentado una opción que se cae por su propio peso.

Por si hubiese alguna duda, el desastre ante el Amorebieta puso de relieve la manifiesta incapacidad del técnico para ejercer ningún liderazgo sobre el plantel. De hecho, ésta fue una de las conclusiones que Mauro ya puso sobre la mesa en la cumbre anterior en el Mencey. "Ha faltado liderazgo", dijo. Y su diagnóstico se ha cumplido a medida que la competición se ha ido acercando al final.

En el club, dirigentes con cierto peso e influencia recuerdan que un Ramis que ya había anunciado su salida el año pasado sí fue capaz de que el equipo compitiera hasta el final y sin máculas como la del sábado pasado en el Heliodoro. Responsabilizan a Garitano, que ya presenta guarismos peores a los del tarraconense en su último curso y que se mostró impotente y sin soluciones ante el desastre del pasado fin de semana. Para colmo, la mala imagen que se dio con la amarilla forzada por Soriano y la posterior respuesta del míster avivó la sensación de descontrol.

Solo en caso de que fracasaran todas las gestiones en curso para buscarle un relevo podría revivir una candidatura que se difumina. La de la redención y segunda oportunidad para Garitano, que en Madrid tiró de argumentario para intentar persuadir a sus interlocutores en la reunión definitiva. Fue en la capital de España, lejos de los focos, esta vez sin foto. Como sí la hubo en el Mencey.