Luis Miguel Ramis detectó señales positivas en la actuación del Tenerife ante el Leganés, independientemente de que planteara el partido con la intención de ganar y que terminara con un empate sin goles. Teniendo en cuenta el 1-2 con el Sabadell del pasado jueves, destacó que la escuadra blanquiazul dio muestras ayer de estar “creciendo a nivel competitivo”.

El entrenador del Tenerife afirmó que el de ayer fue un partido “equilibrado”, un enfrentamiento en el que su equipo no cometió “errores a nivel colectivo, sobre todo en la fase defensiva”. Todo esto, ante un rival al que no le cuesta “generar mucho peligro” si tiene delante un oponente que no sabe estar junto. “Durante los 90 minutos, el Leganés es un equipo que siempre te intimida, porque tiene transiciones rápidas y en cualquier segunda opción te hace daño con su calidad y su velocidad, pero lo controlamos bastante bien”, añadió en rueda de prensa. “Luego, cuando tuvimos el balón, el equipo me gustó un poco más en la primera parte, porque en la segunda estuvimos imprecisos, sobre todo en el campo rival, ya que en el propio fuimos fiables”, continuó el entrenador local antes de ampliar su análisis sobre el funcionamiento ofensivo. “En el campo contrario nos faltó frescura y atrevimiento para sacar algo más”.

Ramis reconoció que, siendo un equipo más lento que muchos de sus oponentes, el Tenerife debe evitar desprotegerse en el momento de buscar el gol. “Tenemos que intentar mejorar en ataque. Trabajamos en ello para tener más opciones, pero también es cierto que en las transiciones ofensivas, te desproteges, y somos un equipo que no puede dejar espacios por detrás de la defensa, porque hay rivales que son más rápidos, así que tratamos de crecer sin perder capacidad competitiva”, explicó dándole “valor” al cero en el apartado de goles en contra ayer.

El tarraconense fue consultado por la participación de Alberto y Javi Alonso, dos jugadores que se reencontraron con la competición después de que el club les levantara la suspensión de empleo por la salida nocturna que protagonizaron dos días antes del partido con el Logroñés. En el plano deportivo, opinó que Alberto estuvo “firme”, aunque añadió que debe “crecer en consistencia defensiva”, y que Javi jugó con “buen criterio” y “midió muy bien” el inconveniente de cargar con una tempranera tarjeta amarilla. Luego, en cuanto al convencimiento de un sector del tinerfeñismo de que, por ese acto de indisciplina, no debieron jugar ayer, se limitó a indicar que respeta esos comentarios y que se limita a intentar extraer el máximo rendimiento del equipo, en este caso, con dos futbolistas que estaban disponibles.

También se refirió al papel de Jorge, titular por primera vez desde el cambio de entrenador. “Lo pusimos con la idea de que apareciera entre líneas y nos ofreciera opciones a la espalda, y le costó un poco más, pero es algo normal. Nos gustan sus condiciones y él tiene que exigirse más porque tiene talento para eso”, dijo Ramis, quien aclaró que se plantó en los tres cambios para no rebajar el nivel de concentración del equipo.

Martí: “Fuimos superiores en ocasiones”

En su segunda visita al Heliodoro como entrenador –perdió en la primera siendo técnico del Girona–, José Luis Martí se llevó un punto que le supo a poco. “Fue un partido muy igualado en el que nos encontramos con un rival que sabía que estaba en una situación límite y que tenía dudas, así que intentó jugar más en largo de lo habitual, aunque luego sí tuvo más posesión”, explicó el míster del Leganés. Martí insistió en que fue un encuentro “disputado” en el que su equipo no estuvo certero en la elección del “ritmo de circulación del balón”. Pese a ello, señaló que “las ocasiones más claras” fueron de la escuadra madrileña. “Tengo la sensación de que ganamos un punto y perdimos dos. Vinimos a ganar y no pudimos conseguirla. Cuando no se puede ganar, se empata. Pero fuimos superiores en la creación de ocasiones”.