El Lenovo Tenerife recupera la sonrisa con un festín ofensivo

En un festín ofensivo (53 puntos en cada parte) y un enorme acierto desde el 6,75 (18 triples sobre 28 intentos), el Lenovo Tenerife recupera la sonrisa tras el varapalo recibido el miércoles. Con una aceptable puesta en escena y un acierto sobresaliente desde el arco hasta el descanso (12/19) el conjunto aurinegro ha doblegado al Casademont Zaragoza (100-106) para sacudirse cualquier atisbo de duda, sumar su decimotercera victoria en esta Liga Endesa (cuarta consecutiva), la séptima lejos del Santiago Martín (sobre 11 posibles) y llegar a la cita copera con muy buenas sensaciones.

Pese a desperdiciar una renta de 15 puntos antes del descanso (38-53 para un 64-63 y luego un 73-72), el CB Canarias evitó que se reeditara el despropósito del choque de la primera vuelta (derrota por 64-70) y en cambio sí logró que el desenlace de este sábado se asimilara a lo acaecido en el duelo del Príncipe Felipe de hace una campaña. Esta vez sin necesidad de llegar a una prórroga pero sí de nuevo con un imperial Shermadini (que tras aportar dos puntos en tres cuartos sumó 10 puntos sin fallo en el periodo final), el cuadro lagunero tiró de paciencia para sacar adelante un compromiso que se le había puesto muy cuesta arriba. Lo hizo, una vez más, con la inestimable ayuda de Guy (19 puntos), pero sobre todo con el liderazgo de Fitipaldo, entregado en la marca atrás sobre McFadden, e imperial en el tiro (5/6 en triples) para irse hasta los 27 tantos.

Se agarró de entada el CB Canarias a la capacidad de pase de Marcelinho Huertas. En su primer intento el paulista no fue correspondido, toda vez que Sastre erró su primer triple liberado desde la esquina. Pero lejos de caer en la misma espiral perniciosa del miércoles en Belgrado (donde acabó con 4/28), el cuadro isleño empezó a producir desde el perímetro... y en la mejor de sus versiones. Lo hicieron Salin (saliendo de bloqueo y desde la esquina) y Doornekamp (en 45 grados) en dos ocasiones cada uno.

Aportación necesaria para equilibrar el daño que en el otro aro se reproducía, como en el partido de la primera vuelta, por parte de Watt. Mucho más rápido y explotando su media vuelta hacia la izquierda, el norteamericano fue de nuevo un quebradero de cabeza para Shermadini y también Diop, anotando y asistiendo (13-12).

Fue con las primeras rotaciones cuando el Lenovo Tenerife dio un punto de inflexión a sus prestaciones, básicamente porque Fitipaldo y Guy empezaron a producir por sí mismos. Penetrando e igualmente desde el perímetro, alargando una serie en el triple que llegó a ser de 6/6, los dos últimos de casi ocho metros (16-22, 9'). Aún sin la fluidez previa, una penetración de Guy por la izquierda tras rebote ofensivo (16-24) y un tapón de Abromaitis permitieron al Canarias acabar el primer periodo con seis de renta (18-24).

Alargó el Lenovo su estado de gracia exterior en el arranque del segundo acto, esta vez de la mano de Fitipaldo (20-30). Con un 8/10 desde el 6,75 el cuadro canarista estuvo muy cerca de engolosinarse con fiarlo todo al tiro de tres. Pero tras dos errores seguidos sí volvieron a acertar Abromaitis y Cook para un 10/15 y un ya clarificador 24-36 (14').

Con dos libres sacados por Shermadini a la carrera el Canarias elevó su renta hasta el +14 (24-38), si bien en el otro aro le estaba costando una barbaridad contener la energía de Mencía, más rápido y activo que sus pares al cuatro y produciendo una barbaridad desde el tiro libre (7/9 al descanso); y también la verticalidad de Bell-Haynes y Langarita. Pese a ello, el cuadro lagunero mantuvo su nivel de acierto, en ese momento con Guy en la faceta de asistente, para que su colchón fuera incluso un poco más grande tras la penetración de Fitipaldo (38-53).

Pese a que parecía estar leyendo bien la zona 2-3 de su rival (aquella que se le atragantó por completo en el partido celebrado en el Santiago Martín), la falta de definición impidió al cuadro de Txus Vidorreta mantener a buen recaudo su diferencia respecto al conjunto maño. Shermadini no fue contundente en una finalización (contra de Langarita) y en su último ataque Salin erró un triple para el +14 antes de que Sulejmanovic dejara la ventaja aurinegra en solo nueve (44-53). Su 12/19 en triples y haber cometido solo cuatro pérdidas mantenían en franquicia a los laguneros.

Ese resquicio de dudas envalentonó al Casademont Zaragoza, que a la vuelta de vestuarios se mostró mucho más agresivo atrás y corriendo todo lo posible y más para castigar el pobre balance defensivo de los aurinegros. Fabricó así el cuadro maño un parcial de 10-0 (48-53) que rompió el Lenovo, después de tres minutos de sequía, por medio de Huertas con un 2+1 (48-56).

Pero la aportación del paulista fue una situación efímera, porque cada ataque del Lenovo era ya una ejercicio de sacrificio, lo que le llevó a sumar solo a cuentagotas (2+1 de Guy y dos libres de Abromaitis). Más que insuficiente frente a un rival lanzado y que en poco más de cuatro minutos ya había sumado 20 puntos para tomar la delantera después de muchos minutos a remolque (64-63).

Solo ahí decidió pararlo Vidorreta, que pidió más dureza a los suyos. Respondió el Lenovo con tres puntos de Fitipaldo en el primer triple intentado por los isleños en ese cuarto (64-66). Frenada la sangría, pero sin conseguir ganar en la fluidez deseada, las penetraciones de los dos bases (17 puntos entre Fitipaldo y Huertas) permitieron que el Canarias metiera el partido en un toma y daca. Y pese a verse por debajo tras un triple de McFadden (73-72), la respuesta desde el perímetro de Sastre (2/2 del equipo en todo el periodo) y una genialidad de Huertas a aro pasado justo cuando acababa el acto permitieron al conjunto tinerfeño afrontar los diez minutos finales con una renta de cinco puntos (73-78), pero sobre todo con la confianza que había perdido en los instantes previos.

Con Shermadini dejándose ver mucho más cerca del aro, un triple de Guy elevó la renta canarista hasta los nueve (76-85) primero y, con la misma secuencia, un par de minutos después, a ocho (80-88). Sin embargo, el Canarias se vio castigado con varios desajustes defensivos y un par de balones sueltos que acabaron en triples para los locales (85-88).

Paciencia en ataque

Un 2+1 de Cook y una finalización en mate de Shermadini dieron aire a los laguneros (85-94), si bien respondió McFadden con la misma (90-94) para que el partido se metiera en un intercambio de canastas que favorecía a los de Vidorreta (96-101). Una pérdida de Fitipaldo y posterior antideportiva de Guy con un minuto por jugarse pusieron en discusión el triunfo canarista. Bell-Haynes anotó los dos libres, pero luego el Zaragoza erró hasta tres triples seguidos.

Salvada la situación límite, el Canarias movió con paciencia en su último ataque largo y acabar dando con Fitipaldo en una esquina para que el uruguayo le pusiera la puntilla al encuentro (98-104) con el decimoctavo triple del cuadro canarista (18/28), que se desquita de su miércoles fatídico en Belgrado (4/28), se consolida en los puestos de playoff, y llegará a la Copa con la moral reforzada.