Punto de arranque, el 24 de agosto. El Lenovo Tenerife 22/23 se pondrá en marcha en apenas 12 días y lo hará con los tradicionales reconocimientos médicos en Hospiten Rambla. Será el punto de partida de la décima campaña consecutiva de los canaristas en la Liga Endesa. Un curso marcado de entrada por una pretemporada extraña a consecuencia de la disputa del Eurobasket y de la Americup, así como de la enésima Ventana FIBA, en esta ocasión clasificatoria para la Copa del Mundo de 2023.

Tienen previsto los aurinegros llevar a cabo los citados reconocimientos en varias tandas y antes de ese fin de semana, si bien es cierto que el número de efectivos del primer equipo canarista será bastante reducido. De esta forma, todo apunta a que jugadores como Marcelinho Huertas (Brasil), Bruno Fitipaldo (Uruguay), Sasu Salin (Finlandia) y Gio Shermadini (Georgia) no se pongan a las órdenes de Txus Vidorreta hasta casi mediados de septiembre, toda vez que parecen fijos en sus respectivas selecciones. Podría suceder igual con los españoles Fran Guerra y Jaime Fernández, que luchan estos días por un hueco en la lista final de Sergio Scariolo.

Sí deberían estar en la Isla para ese pistoletazo de salida las otras incorporaciones realizadas por la escuadra de Aguere para el curso 22/23: los norteamericanos Tim Abromaitis y Elgin Cook, el madrileño Iván Cruz y el senegalés Moussa Diagné. En el tramo inicial de la preparación se sumarán varios canteranos, caso de Alberto Cabrera y Mark Ivankovic, que posteriormente se enrolarán en el Zornotza de la LEB Plata.

Será entre el 26 y el 29 de agosto cuando el Lenovo Tenerife comenzará a trabajar en grupo sobre el parqué. Unos entrenamientos que, durante varios días no podrán realizarse en el Santiago Martín, toda vez que el recinto de Los Majuelos se encontrará ocupado por varios espectáculos musicales e infantiles. El Ríos Tejera de San Benito y el Pabellón Quico Cabrera de Santa Cruz –como ya ha ocurrido en algunos casos previos– se antojan como alternativas para estas sesiones iniciales.

Tendrá el Lenovo Tenerife una pretemporada de apenas un mes, y salpicada por menos amistosos de los habituales. Serán al menos tres, dos de ellos contra el Gran Canaria (con fecha por confirmar) y un tercero frente al Fuenlabrada a solo cuatro días (25 septiembre) del arranque liguero. Será menos tiempo del que han programado otros conjuntos, caso del Unicaja, que ya ayer tuvo un primer contacto con el Martrín Carpena, apremiado por la necesidad de disputar la previa de la Basketball Champions League, prevista para el 21 de septiembre. Por contra, el Real Madrid –condicionado por los internacionales– será de los que más retrasarán su puesta en escena. Los blancos no volverán al trabajo hasta el 5 de septiembre.