Nueve jornadas han bastado para que Tanaya Atkinson demuestre, y de sobra, que está capacitada para codearse entre las grandes en la Liga Femenina Endesa. Máxima anotadora del curso pasado en Liga 2, a sus 23 años la de New Haven mantiene dicha condición en su estreno en la élite. Lo hace con 20,75 tantos por duelo para liderar el fulgurante arranque del Ciudad de La Laguna Tenerife. "Muchas de las jugadoras de la plantilla pueden ejercer de líder", apuntaba la exterior dos semanas antes del estreno liguero. Mensaje a medio camino entre la prudencia y la implicación colectiva. Liberación a una supuesta presión que ha quedado en ello, supuesta. Así quedó patente, por ejemplo, el sábado, cuando nunca se arrugó contra el poderoso Valencia Basket, al que terminó apuntillando, con siete puntos seguidos (y un total de 24), cuando más apretaban las taronjas.

La actuación de Atkinson es el máximo y mejor exponente de un equipo, el morado, que parece haberle cogido enseguida el tranquillo a la élite. Por resultados (6-3) y, a tenor de lo visto esta última jornada, también por sensaciones. "Nos fuimos al parón sabiendo que debíamos mejorar ciertos aspectos, y en ellos hemos trabajado todos estos días", explica Tanaya. Sólido en defensa, el Clarinos parece haber dado un paso al frente en la parcela ofensiva. "Ahora compartimos mejor el balón, leemos mejor las ventajas y sacamos partido del mismatch", comenta la escolta sobre esos desajustes del rival en los que ella consigue un enorme rédito gracias a su explosivo primer paso.

A campo abierto y hacia adentro en el uno contra uno, rara es la ocasión en la que Tanaya no rasca algo positivo. Fuerza imparable que, sin embargo, no se conforma con explotar sus puntos fuertes, sino que trata de ampliar su abanico de recursos. Y lo hace desde el 6,75, su talón de Aquiles en su debut en España. Tras quedarse en un pobre 24,1% de acierto, en estos dos meses Atkinson sigue tirando casi lo mismo, pero con mucha más fiabilidad: 6/16 para un 37,5% de puntería. "En verano trabajé mucho el lanzamiento de tres porque sabía que lo necesitaba, y ahora lo sigo haciendo cada día", reconoce la estadounidense, tan convencida aún de que "otras compañeras" lo pueden hacer "tan bien" como ella, y también empeñada en "seguir compitiendo frente a los grandes" para alcanzar "los objetivos marcados". El primero, estar en la Copa.