COMPETICIÓN

La provincia invade las canchas

Hasta once equipos de Tenerife y La Palma cuentan con plaza en categoría nacional para la temporada 2024-25

Adareva y Canarias tendrán doble representación

La representación para la próxima temporada.

La representación para la próxima temporada. / ED

El Día

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Poco más de un millón de habitantes… y once equipos en categorías nacionales. El tradicional arraigo del baloncesto en la provincia tinerfeña adquirirá una dimensión inaudita la próxima campaña, alcanzando la mayor cifra de representantes en las diferentes competiciones del baloncesto español.

El Lenovo Tenerife será, un año más, la cúspide de esa pirámide de representantes en los diferentes niveles cestistas. Además, la familia aurinegra contará con un aliciente añadido a su participación en Liga Endesa en la campaña 24/25. El ascenso de su filial a Liga EBA provoca que la entidad canarista cuente por primera vez en su historia con dos equipos en categoría nacional, equiparándose con sus otros rivales en la ACB.

La Liga EBA, muy canaria

Una Liga EBA que este año tendrá superpoblación de equipos tinerfeños. Al ascenso del Cajasiete Canarias se le suma la continuidad de La Matanza, Dadarmo Güímar y Real Club Náutico, y la presencia de los dos representantes de La Palma: un Aridane que se quedó a las puertas del ascenso a la LEB Plata y que volverá a partir como favorito para estar en la zona alta, y la Escuela de Baloncesto Felipe Antón, que se hacía merecedora de su plaza al ganar la Primera Autonómica.

Si el Lenovo Tenerife lleva la bandera en el baloncesto masculino, lo mismo se puede decir del Adareva Tenerife en lo que respecta al femenino. Las de Finca España lograron la permanencia en Liga Challenge (segunda categoría nacional) y le sumarán la próxima temporada a su filial, que lograba el ascenso a Liga Femenina 2 el pasado fin de semana. Compartirá liga con el Real Club Náutico, que la pasada campaña lograba una más que meritoria permanencia en su debut en la categoría.

A todo ello hay que añadirle la presencia del Adein Tenerife. El conjunto de baloncesto en silla de ruedas, después de no lograr salir triunfador de la Final a Cuatro por el ascenso, volverá a competir en la Primera División, segundo escalón competitivo de la modalidad.

Una muestra de la buena salud del deporte de la canasta en la provincia, pero que al mismo tiempo puede generar las dudas en cuanto a la sostenibilidad de los diferentes proyectos y a la presencia de jugadores y jugadoras locales en sus plantillas. Por ahora toca celebrar el crecimiento del baloncesto en una tierra que siempre ha producido referentes tanto a nivel individual como de clubes.

Hasta finales de junio, dudas

Al hablar de los once equipos es necesario hacer referencia a los derechos deportivos conseguidos por todos ellos. Que al final hagan efectivos tales privilegios es otra cuestión y hay algunos casos que, a falta de varias semanas para la formalización de las inscripciones en las diferentes categorías, pueden generar dudas. El Lenovo Tenerife no ha hecho aún oficial la participación de su filial en Liga EBA y, en el caso de que finalmente se produzca esa confirmación, la duda estará en cómo pueda afectar eso a un Náutico que ha mantenido un acuerdo de vinculación con la entidad canarista durante 11 temporadas y que, en principio, dejaría de tener esa relación.

A ello se le suman los cambios a nivel directivo en la sociedad nauta, que mantienen en el aire la continuidad de sus proyectos tanto en EBA como en Liga Femenina 2. Con todas esos interrogantes, y otros procedentes de equipos de la Península que tampoco tienen certificada su participación en la categoría que les corresponde la próxima temporada, clubes descendidos el año pasado como el CB Tacoronte o el Clarinos permanecen a la expectativa, además de otros proyectos que podrían apostar por hacerse con una plaza vacante en categoría nacional. La respuesta, en unas semanas.