Carlos Olano seguirá al frente de la Federación Canaria de Baloncesto (FCB) tras ser el único candidato a la presidencia del ente federativo, con lo que las elecciones previstas para este año no se celebrarán. Al no ofrecerse ningún otro candidato, automáticamente el lagunero vuelve a repetir, por lo que estará dirigiendo el baloncesto canario hasta el ejercicio 2026.

Carlos cogió los mandos federativos en 2018 tras dejar Manolo Gómez la presidencia. Siempre vinculado al baloncesto base, sin desmerecer el nacional, ha pasado por equipos como el Tenerife Rural, Cepsa Tenerife y la cadena de equipos del Colegio Nuryana, entre otros, destacando por su perfil conciliador por encima de cualquier otro.

Ahora, tras cuatro años muy complicados y condicionados por la pandemia, principalmente, el baloncesto canario da por buena la gestión del equipo comandado por el experimentado técnico, ahora en funciones administrativas.

«Hoy (por ayer) tomé posesión del cargo porque no se presentó nadie más, no hubo elecciones por esta circunstancia. El jueves se cumplía el plazo para la presentación de candidatos a la presidencia de la Canaria y al no proponerse nadie, pues automáticamente paso a tomar posesión», afirmó.

Acerca de los cambios, Olano explicó que «se ha cambiado un poco la conformación de la asamblea... Algunos clubes, entrenadores, jugadores y árbitros y si no se ha presentado nadie, o ninguno se ha posicionado, es que la cosa ha ido más o menos bien. Esto es una auténtica locura y hay que estar loco para presentarse (risas). Eso es así», bromeó.

Bajo su mando la FCB ha vivido el peor momento de su historia por la irrupción de la pandemia, ya que «tuvimos que afrontarla de desigual manera. Primero tuvimos que suspender las competiciones, todas. Luego el gran problema que sufrimos como Canaria fue el de los distintos niveles de restricciones, porque cada Isla tenía el suyo y con medidas muy distintas a aplicar. Fue un caos tremendo, pero al final las pudimos sacar con matices, aunque sin los Campeonatos de Canarias porque era un riesgo claro».

Al día de hoy, Carlos Olano destaca el trabajo realizado, incrementando el número de equipos, por ejemplo, en la Primera masculina y femenina, la Liga Júnior, la cadete. También, entre otros, la puesta en marcha de programas tan espaciales como Baloncesto sin Límites, campeonato de selecciones por Islas; «la verdad es que estoy muy contento».

Por último, recordó que la situación económica de la FCB es buena y refuerza la idea de reinvertir en el propio baloncesto. Puso como ejemplo en este punto el reparto de 1.600 euros a los clubes por equipo: «Cualquier club puede tener seis equipos, uno en cada categoría. No nombro a ninguno. Lo que se ha conseguido es que los clubes estén comprometidos y paguen. Solo asumen el compromiso de que tienen que pagar y lo que hemos impuesto es que no puedes empezar la siguiente temporada, si tienes deudas de la temporada anterior. Ni a las insulares», concluyó.