Grandioso. Así podría definirse el partido que completó el Sanaya Libby’s La Laguna en la semifinal que le enfrentaba ayer al todopoderoso Gran Canaria Urbaser. Las blanquiazules superaron (1-3) al conjunto que llegaba como cabeza de serie al torneo que se celebra en Lugo, y lo hizo tras un encuentro que se decidió en la red. El funcionamiento coral de las pupilas de Juan Diego García –seis jugadoras se repartieron los puntos desde los primeros compases– fue clave para frenar a un Olímpico que, con chispazos y desde el servicio, en determinados momentos inquietó a las leonas, sobre todo cuando logró ponerse con el 1-2. Llabrés cuajó una magnífica actuación para frenar a Helia González. Esta mañana, (11:30 horas), las de Taco se las verán en la final contra el Arenal Emevé.
El Sanaya Libby’s dejó notar su ritmo de competición –frente a un rival exento en los cuartos de los cuartos– para ponerse por delante desde los primeros puntos. Con el primer botín de 15 créditos (10-15), aplacó a una Matienzo que no llegó a encontrarse a sí misma –fue la ficha sustituida para que entrara Helia González–. La superioridad tinerfeña se dejó notar en un set que cerró, con una magistral finta –una más–, Patricia Aranda.
La directora de juego destapó el segundo con una más. Pese al buen arranque, las grancanarias, ahora con la dirección de Priante, sembró las dudas en la defensa blanquiazul (9-6). Juan Diego García lo paró justo a tiempo y, con un parcial de 0-5 en el que sacaba Belly Nsunguimina, se puso a un punto (10-11).
El Sanaya Libby’s sacó a relucir su carácter para minar la moral al cuadro dirigido por Pascual Saurín. El trabajo de las centrales para frenar las acometidas de Gonçalves, vital; Jenelle Jordan fue protagonista del bloqueo que supuso el 17-19, mientras, Belly puso el gorro del cierre de set (20-25)
Quedaba mucha tela por cortar y el Olímpico, bajo la dirección de Priante y la estabilidad de Helia, se impuso en el tercer set para cortar la racha blanquiazul. Pese al buen arranque (0-4), irrumpió Lucía Varela desde el saque (11-8).
Los problemas en la recepción eran patentes; no obstante, el Haris igualó en el punto 19. Al final, la balanza se decantó a favor de las grancanarias, quienes volvieron a ser letales desde el servicio (Helia lo encaminó con dos puntos directos).
La inercia positiva era del Urbaser. Y entonces el Sanaya Libby’s La Laguna volvió a hacer lo más difícil. Sí, sin dejarse amedrentar, con mentalidad ganadora y funcionamiento coral. Belly se fue al saque, el Olímpico no tenía opción para montar bien –ni tan siquiera con Del Burgo en pista– (6-11). El Haris era mejor en todos los parámetros del juego, y eso desesperó al cuadro del CID. Jenelle supo cerrar y atacar en la recta final de lo que supuso la 21ª victoria consecutiva. Hoy, momento para la conquista del sueño en el que puede ser el segundo título copero de las tinerfeñas tras el conquistado hace un lustro.
