Más de 7.000 personas disfrutan en Los Silos del Festival del Cuento

La semana de actividades finaliza con un día cargado de público y amor por la palabra

Patricia Ginovés

Patricia Ginovés

El Festival Internacional del Cuento de Los Silos clausuró ayer su XXVIII edición con una jornada repleta de actividades, que comenzó a las nueve de la mañana y se prolongó más allá de las diez de la noche. Más de 7.000 personas han avalado la celebración de esta nueva edición del encuentro con las palabras, que se ha convertido en una cita ineludible en el norte de Tenerife con el paso de los años. Con más de dos centenares de espectáculos programados y una treintena de narradores de siete países diferentes, este entrañable festival ha vuelto a ser el epicentro nacional de la palabra desde el pasado día 5 y hasta ayer.

Más de 7.000 personas disfrutan en Los Silos del Festival del Cuento

Más de 7.000 personas disfrutan en Los Silos del Festival del Cuento / P. G.

Aunque muchos de los espectáculos programados para esta nueva edición requerían la compra de entrada, eso no ha echado para atrás a un público ávido de nuevas propuestas. Así, los espectáculos programados se han llenado de un público que «está acostumbrado a escuchar», una característica que han destacado varios de los narradores que han estado en Los Silos en esta edición. El cartel de no quedan entradas ha sido colgado en la mayoría de las funciones vendiéndose casi 6.000 entradas a lo largo de estos días.

Más de 7.000 personas disfrutan en Los Silos del Festival del Cuento

Más de 7.000 personas disfrutan en Los Silos del Festival del Cuento / P. G.

Además, a esta cifra hay que sumarle los espectáculos que han llenado las calles de Los Silos de manera más espontánea para el público. Las plazas encuentadas (plaza de La Luz, La Placeta y la plaza de El Calvario) han estado abiertas a todo tipo de públicos sin necesidad de adquirir ningún tipo de entrada y se han llenado de las más variadas propuestas, desde una feria de artesanos de la palabra, a sesiones de cuentos para adultos o recitales.

El Festival Internacional del Cuento de Los Silos posee algunas propuestas que se han convertido en encuentros tradicionales, que ya no pueden faltar en esta programación. En esta ocasión, a las plazas abiertas se ha sumado la feria del libro, la zona gastronómica –precisamente una de las novedades de esta edición– y la feria de los artesanos de la palabra, otra de las principales innovaciones dentro del festival de 2023.

En esta última propuesta, el público, de manera reducida, ha tenido la oportunidad de encontrarse con narradores, autores, escritores o ilustradores de un modo mucho más íntimo y próximo estrechando el contacto dentro de los habitáculos diseñados por el artista Luigi Stinga con motivo de esta celebración.

La última jornada del festival, que se celebró ayer comenzó en Erjos con una actividad que aunó música y palabras en mitad del bosque de laurisilva junto a los narradores Juanma Moreno (Tenerife) y Jorge Serafim (Portugal). Además, el público pudo acudir a una conferencia del escritor mejicano Adolfo Córdova y a la tradicional ronda de narradores en el antiguo convento de San Sebastián. Esta clausura también contó con actividades y cuentos en familia, gracias a María Kapitán y su De verdad regadera y otras excusas. Además, la palabra volvió a conquistar las calles con El libro de las bestias, una propuesta de Ramón Llull que se desarrolló en la plaza de La Luz de la mano de la agrupación de teatro de Filología de la Universidad de La Laguna. Así, la calle continuó siendo uno de los protagonistas de este festival que también ofreció a los asistentes una cabalgata que se encargó de llevar la fantasía y la palabra por las empedradas calles.

El director del Festival Internacional del Cuento de Los Silos, Ernesto Rodríguez Abad, expresó ayer que el púbico ha aceptado de manera positiva «la nueva ordenación de los espacios para el desarrollo de la palabra» en Los Silos y añadió que «la oferta de maneras de contar, la calidad de todos los intérpretes e invitados es inmejorable. Además hay una calidad humana muy grande». El director destacó los dos nuevos espacios de esta edición: la zona gastronómica y la feria de artesanos de la palabra. En este último espacio «las personas que se acercaban salen como flotando en una nube mágica, les brillan los ojos al lado de los talleristas y los escritores. Es lo que pretendíamos».

En las imágenes de esta página, varias de las actividades que se desarrollaron en la mañana de ayer en las calles de Los Silos, durante la jornada de clausura de la XXVIII edición del Festival Internacional del Cuento.