Arte

TEA celebra a Óscar Domínguez

La sala de arte homenajea al surrealista tinerfeño con ‘La conquista del mundo por la imagen’, abierta hasta el 29 de octubre

Almudena Cruz

Almudena Cruz

Setenta piezas firmadas por Óscar Domínguez –trece de ellas nunca expuestas antes– son la columna vertebral que sustenta la nueva y esperada propuesta de TEA Tenerife Espacio de las Artes. Esta muestra suma la sexta exposición dedicada al genial surrealista tinerfeño desde que la sala de arte contemporáneo del Cabildo de Tenerife abriera sus puertas, hace ahora 15 años.

Óscar Domínguez. La conquista del mundo por la imagen estará abierta hasta el 29 de octubre e incluye un recorrido por la que está considerada como la mejor década del recordado artista: los años 30. Se trata, y en eso coincidieron todos los portavoces institucionales presentes en la presentación, de un acontecimiento «único» para la Isla. 

No en vano, gracias al esfuerzo del equipo que capitanean el director artístico de TEA, Gilberto González, y el conservador de las Colecciones TEA y comisario de la exposición, Isidro Hernández, varias de las piezas más emblemáticas del Domínguez han regresado a Tenerife. Es el caso –por citar los dos ejemplos más destacables– de Cueva de Guanches (procedente del Museo Reina Sofía) y El Drago de Canarias (cedida para la ocasión por la Colección Abanca).

Figura clave en los movimientos de vanguardia del siglo XX, a la altura de los genios de Dalí y Miró, Óscar Domínguez sorprendió –y sigue sorprendiendo– por su enorme calidad plástica y una iconografía innovadora. «Lo que hemos querido aquí es celebrar a Óscar Domínguez», aseguró Hernández. Lejos de decaer, el interés internacional por este autor tinerfeño no para de crecer. Aparecen obras nuevas hasta ahora desconocidas y está considerado como un gran visionario a nivel internacional. 

En la presentación de la nueva exposición de TEA estuvieron presentes los principales representantes de la institución insular. Su presidente, Pedro Martín, rompió el hielo señalando que la apertura es «un día importante para el Cabildo y para todas aquellas personas que se emocionan con el arte». «Ojalá sean muchas las personas que vengan a TEA a ver esta muestra y que eso ayude a divulgar el legado de nuestro surrealista más universal». 

Martín también lamentó que finalmente el Cabildo, que acudió a una puja del pasado 1 de marzo en Christie’s, no pudiera hacerse con La máquina de coser electrosexual. Esta pieza ha duplicado con creces su valor de mercado en apenas una década. Finalmente fue adjudicada por mas de 5,2 millones de euros. «No fue posible pero teníamos la obligación de intentarlo», aseguró Martín sobre la fallida compra.

Con todo, Hernández fue el encargado de elogiar la colección que del artista existe en Tenerife. «Una colección es siempre un proyecto a largo plazo y hay que estar siempre atentos a las oportunidades. El Cabildo lleva trabajando en los fondos de Domínguez desde 1994 y se partió de cero. Poco a poco se ha construido una colección que es un mérito de todos y eso hay que decirlo. Es la que, junto a la del Reina Sofía, mejor refleja todas sus etapas».

Por su parte, Gilberto González habló de lo oportuno de emprender ahora un «trabajo de arqueología institucional» para entender bien los orígenes de TEA. «Óscar Domínguez sigue siendo un elemento fundamental en la historia de TEA y de sus colecciones. Esta muestra trae a la contemporaneidad la obra de Domínguez».

El consejero insular de Cultura, Enrique Arriaga, avanzó la posibilidad de que una muestra con las piezas de Domínguez pueda mantenerse de forma permanente en la sala de arte del Cabildo. «Sería un atractivo para cualquier amante del arte interesado en su obra que visite nuestra Isla», valoró. 

También asistió a la inauguración para medios de comunicación un representante de la familia del creador, Carlos Acosta. Además de agradecer el esfuerzo del equipo de la sala, elogió el resultado obtenido y consideró «todo un honor» poder estar presente.

Las piezas del artista no están solas en esta nueva muestra sino que aparecen acompañadas –y puestas en contexto– por obras de arte de Maruja Mallo, Leonora Carrington, Victor Brauner, Roberto Matta, Remedios Varo, André Masson,Dora Maar, Manolo Millares, María Belén Morales, René Magritte, Yves Tanguy, Maribel Nazco, André Breton, Jeannette Tanguy, Georges Hugnet, Germaine Hugnet, Maud Bonneaud, Jacques Hérold, Paul Éluard, Pedro de Guezala, Gordon Onslow-Ford, Wifredo Lam, Marcel Jean, Anton Prinner, Louise Janin, Peter Sachs, Roland d’Ursel, Ernesto Fernando Baena Jover, Hans Bellmer y Luis Ortiz Rosales. 

El recorrido por las salas se estructura en varios ámbitos en los que se abordan temas cruciales en la obra del artista: Cueva de Guanches, El Drago de Canarias, la pintura litocrónica, las creaciones cósmicas y se completa con una sección dedicada a la cronología de Domínguez. 

A todo ello hay que añadir la presencia de piezas inéditas, muchas procedentes de Francia, que son en sí mismas toda una novedad para el público de TEA. Para que esto haya sido posible, ha sido necesaria la colaboración de numerosas instituciones públicas y privadas. El listado es impresionante: el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, la Fundación Telefónica (Madrid), el Instituto Valenciano de Arte Moderno Centro Julio González (IVAM), Abanca (La Coruña), Centro Atlántico de Arte Moderno de Gran Canaria (CAAM), Presidencia del Gobierno de Canarias, LM Colección (Tenerife), Gobierno de Canarias, Loro Parque (Tenerife), Fundación CajaCanarias; las galerías Guillermo de Osma (Madrid), Leandro Navarro (Madrid), Applicat-Prazan, Galerie Dil, Galerie 1900-2000, Galerie Le Minotaure, Galerie Malingue (todas de París) y colecciones privadas de Madrid, Santander, París, Bruselas, Dijon, Basile, Zurich y Tenerife.

Además de la próxima publicación de un catálogo, los gestores de TEA han previsto la organización de un ciclo de conferencias que será, además, la antesala de las celebraciones por el centenario de la publicación del primer manifiesto surrealista en el París de 1924.