Las renuncias a herencias aumentaron un 20% con el ‘pacto de las flores’

Cada día de 2022 seis isleños rechazaron su legado

Durante el gobierno de Torres se registraron 859 donaciones menos que en la anterior etapa de Clavijo

Cementerio de San Gregorio.

Cementerio de San Gregorio. / Yaiza Socorro

Andrea Saavedra

Andrea Saavedra

Cada vez son más los canarios que renuncian a su herencia. Los datos del Consejo General del Notariado reflejan que la cifra de isleños que decide rechazar los bienes que les habían legado sus ascendientes y familiares crece con el paso del tiempo. El año 2022 marcó un récord, al menos desde que existen estadísticas oficiales, al haber registradas 2.230 renuncias, más del triple que hace diez años (718). Un pico histórico que coincidió con el gobierno del pacto de las flores –conformado por PSOE, NC, Podemos y ASG– y su decisión de eliminar desde enero de 2020 la bonificación general del 99,9% del Impuesto de Sucesiones y Donaciones que el ejecutivo de Fernando Clavijo (CC) ya implantó de 2016 a 2019 y ha recuperado ahora con su nuevo Gobierno en coalición con el PP. Las cifras reflejan un crecimiento del 20% en el número de renuncias a herencias desde que el cuatripartito tomó la decisión de eliminar la bonificación del gravamen.

De enero de 2020 a marzo de 2023 –último dato registrado– la cifra llegó a 6.185 renuncias, mientras que de enero de 2016 a marzo de 2019 los rechazos fueron 5.142, 1.043 menos que en la siguiente legislatura. El pasado año la cifra batió todos los récords y superó los 2.000 casos, lo que se traduce en que cada día seis isleños renunciaron a su herencia. La consejera de Hacienda del Gobierno canario, Matilde Asián, utilizó precisamente ese dato para justificar la vuelta de la bonificación del impuesto de sucesiones que el pacto de las flores eliminó. «Canarias es una de las regiones con mayor porcentaje de herederos que declinan la sucesión debido, principalmente, a los costes que les supone la aceptación», apuntó la consejera el pasado lunes al anunciar la medida tras el Consejo de Gobierno.

El Ejecutivo recupera la rebaja del impuesto de sucesiones que repercutirá en los familiares hasta el cuarto grado –hijos, cónyuges, tíos y sobrinos– y en el caso de las donaciones, será solo hasta el segundo grado, por lo que deja fuera a los familiares de tercer o cuarto grado y los externos

Donaciones

Los registros del Consejo General del Notariado también apuntan a una reducción en el número de donaciones desde que el socialista Ángel Víctor Torres se puso al frente del Ejecutivo autonómico en 2019. Se produjeron 859 donaciones menos respecto al primer gobierno de Clavijo.

La bonificación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, aprobada ayer por el Ejecutivo a través de un decreto ley, no ha gustado a los socialistas canarios que ayer denunciaron que la medida «representa un regalo fiscal a las rentas altas del Archipiélago». Además, aseguraron que solo beneficiará al «5% de los canarios».

Según el líder del PSOE, con la ley anterior, «un señor o una señora que recibía una herencia de 300.000 euros y era hijo único, no pagaba absolutamente nada». Tampoco lo hacían, según sus palabras, dos hermanos, con un piso o un terreno con hasta 600.000 euros. «CC y PP quieren hacer pensar ahora que con nosotros el que heredaba cualquier cosa tenía que pagar un impuesto de sucesiones o de donaciones y eso es rotundamente falso», explicó.

El cuatripartito decidió, en 2019, que la exención de la cuota tributaria –ahora vigente– por motivos de aceptación de una herencia o donación quedaría limitada a los 300.000 euros a partir del 1 de enero de 2020. Se bonificaba un 90% para las herencias y donaciones entre 300.000 euros y 400.000 euros por beneficiario, un 80% entre 400.000 euros y 500.000 euros y así sucesivamente. En el caso de que superara los 1,2 millones de euros, se perdía el derecho a cualquier ayuda.

El presidente de Nueva Canarias, Román Rodríguez, aseguró ayer que es «completamente falso» el argumento de Asián de que los beneficiarios renuncian a la herencia por la existencia de este tributo. Según Rodríguez, existen diferentes estudios que demuestran que uno de los principales motivos para rechazar los citados patrimonios son las diversas cargas que conllevan –como las deudas– y las desavenencias entre los familiares. Todo lo contrario que el portavoz de Agrupación Socialista Gomera (ASG), Casimiro Curbelo, quien aplaudió la medida y aseguró que ponerla en marcha significa «dar un alivio» a las familias canarias, pues «minimiza significativamente» la presión impositiva sobre las familias.

Lo cierto es que las causas que explican la avalancha de renuncias a herencias de los últimos años van más allá del Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Los datos de los últimos años coinciden con un incremento de la mortalidad por la pandemia, lo que aumentó el número de sucesiones y de deudas.

Y además, aceptar un testamento conlleva aceptar lo bueno y lo malo, por lo que muchos herederos se encuentran con que los familiares han dejado más deudas que beneficios y optan por renunciar a lo que les correspondería. La renuncia de las herencias es más habitual cuanto peor es la coyuntura económica y el coronavirus y la subida de precios posterior han provocado que los últimos años sean especialmente complicados en este sentido. Esto unido a que Canarias es una de las regiones con los sueldos más bajos, por debajo de la media nacional, impide a muchas familias asumir los gastos derivados de las situación. Los datos de la Comunidad Autónoma la sitúan entre las regiones con mayores porcentajes de herederos que declinan la sucesión.

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