Astrid Pérez se estrena entre críticas al Ejecutivo y halagos al electorado

El Parlamento de Canarias celebró este martes la primera sesión plenaria de la XI Legislatura. A diferencia de lo ocurrido hace cuatro años, cuando la elección de los miembros de la Mesa de la Cámara se complicó por la falta de la obligatoria paridad –no puede haber más de tres hombres o de tres mujeres en el órgano de gobierno del Parlamento–, el de este martes sí fue un pleno del todo institucional. O casi. El presidente saliente del Legislativo autonómico, el socialista Gustavo Matos, dejó durante su último discurso en el cargo una crítica a Vox apenas velada. Matos volvió sobre el pretendido «riesgo» que corren valores como la tolerancia o el respeto y sin más deseó que Canarias «siga siendo la excepción». A nadie se le escapaba que el marco del mensaje era la entrada en la Cámara regional de los voxistas, quienes, por otra parte, ni se inmutaron. Y tampoco se le escaparon a nadie las críticas que la sucesora de Matos en la presidencia del Legislativo, la popular Astrid Pérez, lanzó contra el Gobierno de Ángel Víctor Torres. Lo hizo con el suficiente cuidado para no desvirtuar su discurso inaugural al frente de la primera institución del Archipiélago y para no deslucir el apartidismo que el cargo exige aparentar. Pero también lo hizo con cierta carga de profundidad. Tanta que afirmó que no ha habido «progresos» en el bienestar de los isleños en los últimos años, algo a lo que señaló como la causa del vuelco político en la Comunidad Autónoma.

Astrid Pérez, cuyo nombramiento salió adelante gracias a los 38 votos a favor de los grupos parlamentarios de Coalición Canaria, Partido Popular, Agrupación Socialista Gomera y Agrupación Herreña de Independientes –los diputados del PSOE y de Nueva Canarias votaron en blanco y los de Vox, a su propio candidato, Nicasio Galván–, resaltó en sus primeras palabras desde el principal sillón del hemiciclo la «madurez» que a su juicio han demostrado los electores. «Madurez», profundizó, para «cambiar el rumbo de nuestro destino cuando no se producen progresos en el estado del bienestar». Una crítica implícita a la labor del Ejecutivo del pacto de las flores, hoy en funciones, que algunos miembros de la bancada socialista calificaron después de poco institucional. Sea como sea, Pérez aseguró que la nueva Cámara autonómica «visibiliza el cambio» que ha querido la sociedad canaria y ahondó en la crítica implícita al Gobierno de Torres al sacar a colación la situación de las políticas públicas de vivienda o de cuidado de las personas dependientes: «La ciudadanía espera que trabajemos con tesón para cambiar y mejorar su vida y que abandonemos los peores datos estadísticos del país».

El Parlamento arranca su XI Legislatura con la popular Astrid Pérez en la presidencia

Al margen de los dos rejonazos al Ejecutivo, que pronto dará paso al nuevo Gobierno bipartito de CC y PP –Pérez accede a la presidencia del Parlamento en virtud de los acuerdos alcanzados entre nacionalistas y populares–, la que ya es la segunda mujer al frente del Legislativo de la región aseveró que asume el reto con el compromiso de situar la justicia social, el respeto de las singularidades del Archipiélago, la unidad, la solidaridad y el progreso como ejes de su mandato. Con los exministros José Manuel Soria y Carolina Darias entre los asistentes –fue precisamente la ahora alcaldesa de Las Palmas de Gran Canaria la primera mujer en presidir la institución entre 2015 y 2019–, la representante del PP recordó que compatibilizará su cargo en la Cámara legislativa con la alcaldía de Arrecife, la capital de Lanzarote. Dos «honores» que considera comparables y que colman, dijo, sus aspiraciones políticas. Es la primera vez que un diputado lanzaroteño, en este caso una diputada, ocupa la presidencia del Parlamento, «el verdadero centro de la política», subrayó Pérez, que puso especial énfasis en garantizar que su labor se guiará por «la búsqueda del consenso, la moderación, el respeto mutuo, el interés general y la lealtad institucional por encima de intereses partidistas y cuestiones ideológicas».

Nueva Mesa

La primera sesión de cada nueva legislatura autonómica no solo sirve para elegir al presidente del Parlamento, que en sentido estricto es el presidente de la Mesa de la Cámara, sino también a los restantes cuatro miembros del órgano de gobierno de la institución: dos vicepresidentes, uno primero y otro segundo, y dos secretarios, también uno primero y un subalterno. Con el principal sillón para Astrid Pérez y el PP, los otros cuatro les correspondían a los dos grupos con más escaños, es decir, a las bancadas del PSOE y de CC. Bajo estos condicionantes, la nacionalista Ana Oramas, la histórica voz de Coalición en el Congreso de los Diputados, resultó designada para ejercer la vicepresidencia primera de la Mesa de la Cámara durante los próximos cuatro años. El nombramiento de Oramas salió adelante gracias a los mismos 38 votos a favor que hicieron presidenta a Pérez, esto es, los de CC, PP, los gomeros y los herreños, que también son los mismos que le dieron a Mario Cabrera, otro nacionalista, el cargo de secretario primero. La vicepresidencia segunda la ejercerá Gustavo Matos, que baja así un par de escalones en el particular organigrama del Legislativo canario, y su correligionaria Patricia Hernández desempeñará las funciones de la secretaría segunda. A favor de Matos y Hernández votaron los 28 diputados del PSOE y de NC. Los voxistas lo hicieron a su propio candidato también en las elecciones de los vicepresidentes y secretarios, en todos los casos a Nicasio Galván, que obtuvo así los insuficientes cuatro apoyos de sus compañeros de grupo.

Entre el discurso de apertura de Gustavo Matos y el de cierre de Astrid Pérez se tuvo que designar a los integrantes de la llamada Mesa de Edad –un órgano efímero que integran el diputado electo de más años y los dos de menos para encargarse de los trámites de la sesión constituyente– y tocó llamar a sus señorías para que jurasen o prometiesen el cargo. En función de las creencias de cada parlamentario se pone o se quita de la mesa un crucifijo que va y vuelve a cada rato, y no siempre con rigor –hubo quien juró sin la presencia del Cristo–. Es la Mesa de Edad la que llama a los diputados para que juren o prometan ante el pleno, y, a continuación, la persona que preside este órgano, que este martes fue la socialista Lucía Tejera por su mayor edad, les cuelga la correspondiente credencial.

21.840 euros

Cada uno de los 70 parlamentarios recibe una medalla de plata bañada en oro que con sus miniaturas y complementos vale 312 euros, según informó Efe. En consecuencia, el coste total para las arcas de la Cámara regional, y por ende para las arcas públicas, asciende a 21.840 euros.

Los partidos aprovecharon las horas de antes y después del pleno para reunirse e ir perfilando el reparto de responsabilidades en sus respectivos grupos. En el caso de Coalición Canaria, el comité ejecutivo nacional les trasladó a sus representantes en la Cámara los nombramientos de David Toledo como presidente del grupo parlamentario y del eterno José Miguel Barragán como portavoz. Toledo, que es secretario de Organización de los nacionalistas, estrena así nuevas funciones, mientras que Barragán repite en la portavocía. Y repiten también los dos líderes de la bancada de NC, donde Luis Campos continuará como portavoz y Carmen Hernández, como presidenta. En el PSOE ya se conocía que Ángel Víctor Torres, que encara sus últimos días como jefe del Ejecutivo autonómico, será el presidente de un grupo que tendrá como portavoz a Sebastián Franquis. Casimiro Curbelo seguirá llevando la voz cantante en la bancada de la ASG y Nicasio Galván hará lo propio en la de Vox. Ni la ASG ni los voxistas tendrían grupo propio –estarían en el mixto– de no haberse modificado el reglamento de la Cámara en la anterior legislatura para bajar de cinco a tres el número mínimo de parlamentarios que da derecho a bancada propia.

La de este martes fue la última cita en el salón de plenos para representantes del Gobierno como Yaiza Castilla, que no continuará en labores políticas, o Román Rodríguez, que no salió elegido en las urnas y que se dedicará en adelante a tareas de partido (NC).

Sebastián Franquis

El nuevo portavoz de los socialistas en el Parlamento de Canarias, Sebastián Franquis, reafirmó este martes la voluntad del PSOE de llegar a amplios acuerdos con el próximo Gobierno regional en los «grandes asuntos» de las Islas. No obstante, el todavía consejero de Obras Públicas puntualizó que esa voluntad de entendimiento no está reñida con la exigencia: «Seremos exigentes a la hora de construir una Canarias mejor».

David Toledo

David Toledo, que se estrena como presidente del grupo parlamentario de Coalición Canaria (CC), aseguró que la gran tarea que tendrá por delante el nuevo Ejecutivo autonómico será «reconstruir el estado del bienestar», que «mermó totalmente» en los cuatro años de gobierno del pacto de las flores, agregó. Toledo explicó que se adoptarán medidas tributarias «claras y específicas» para aliviar los bolsillos de los ciudadanos.

Poli Suárez

El diputado y secretario general del PP de Canarias, Poli Suárez, aseguró este martes, una vez constituido el nuevo Parlamento, que el Gobierno que presidirá Fernando Clavijo y vicepresidirá Manuel Domínguez redoblará esfuerzos «para generar ilusión y confianza en nuestra tierra». Suárez añadió que la meta es ayudar a resolver los «problemas reales» de los isleños, para lo que el PP «se pondrá en marcha desde el minuto uno».

Luis Campos

Luis Campos, que seguirá en los próximos cuatro años como portavoz parlamentario de NC, hizo de algún modo un llamamiento a la nueva Cámara autonómica para «seguir construyendo el proyecto nacional de Canarias en sentido amplio». Esa será, al menos, la voluntad de los canaristas. Campos espera una legislatura «más tranquila» que la anterior y reafirmó la apuesta de los suyos por el blindaje de los servicios públicos.

Nicasio Galván

Nicasio Galván, parlamentario de Vox y que fuera candidato a la presidencia del Gobierno regional el 28M, afirmó que los suyos vienen «llorados de casa» y dispuestos para «trabajar», y se mostró convencido de que serán capaces de acabar con ideas preconcebidas sobre su fuerza política. «Cuando la gente nos conozca y vea lo que proponemos, vendrá con nosotros y navegaremos juntos por el bien de Canarias», dijo.

Casimiro Curbelo

El líder de la Agrupación Socialista Gomera (ASG) Casimiro Curbelo puso este martes entre las necesidades impostergables de la Administración autonómica la reducción de la burocracia, que tantos proyectos e inversiones retrasa. «La burocracia nos come y hay que simplificarla aún más», subrayó un Curbelo que también sitúa la lucha contra el cambio climático entre las tareas irrenunciables: «No es una opción, es una obligación».