Decpeción. «No nos ha aclarado nada, ha sido una reunión amable» o «una visita de cortesía». Los presidentes de las patronales canarias, Agustín Manrique de Lara (Confederación Canaria de Empresarios) y José Carlos Francisco (CEOE de Tenerife) valoraron de esta forma el encuentro con la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en el encuentro con empresarios y sindicatos, en la Presidencia del Gobierno, en Las Palmas de Gran Canaria. Ambos dirigentes tenían expectativas de que entrara en la letra pequeña de cómo va a ser el reparto de los 19.000 millones de euros que gestionará España este año de los fondos europeos Next Generation o que les aclarara la «escasa sensibilidad» del Gobierno central en el cumplimiento del Régimen Económico y Fiscal (REF) en asuntos como el diferencial fiscal con la Península en el sector audiovisual o en la aprobación, a «última hora» (en el último Consejo de Ministros de 2020), de la ampliación de un año para invertir los fondos de la Reserva para Inversiones (RIC) que se dotaron en 2016 y cuya materialización finalizaba el 31 de diciembre. Este reconocimiento se hizo ocho meses después de que las organizaciones empresariales, asesores fiscales, universidades y expertos solicitaran esta prórroga por primera vez ante la parálisis de la economía por la pandemia. También le pidieron medidas concretas para reactivar el turismo. La ministra no respondió al reproche del REF y en cuanto al resto fueron vaguedades.

«Solo nos ha aclarado que de los primeros 70.000 millones de la Unión Europea se reciben 19.000 millones y el siguiente pago es después del 1 de enero del 2022 y está condicionado a la reforma laboral, con lo cual ya tenemos una cosa clara, y es que quedan seis meses para que los agentes sociales y el Gobierno de España negocien una reforma laboral que encaje a la UE», precisó Manrique de Lara. Calviño basa la reforma laboral en cuatro aspectos: «negociación colectiva, las subcontrataciones, los tipos de contratos de trabajo y desarrollar una herramienta, que no la van a llamar ERTE, que facilite la estabilidad a los trabajadores en los momentos en los que cae la actividad como existe en otros países de la UE», explica el dirigente empresarial de la CEE.

En ese sentido, la ministra «estuvo bien pero echamos en falta que concretase respecto a los fondos Next Generation y cómo se van a distribuir esos 19.000 millones que llegan», señaló. Al parecer la ministra dejó claro que «las comunidades autónomas tienen poco que decir en el reparto de esos fondos».

Los empresarios le plantearon las dificultades del sector turístico para ponerse en marcha y «los cuellos de botella para reactivarse porque no es darle al botón de encendido y el sector se pone al cien por cien, sino que va entrando de forma progresiva, pues se tienen que reparar los aires acondicionados estropeados, poner los termos de agua caliente, arreglar los jardines, pintar...». Y todo esto, con la incertidumbre de lo que va a suceder en septiembre, octubre o noviembre, la temporada alta en Canarias. La ministra les ofrece más crédito ICO. Los empresarios piden ayudas específicas. Manrique de Lara solicitó además un marco nacional de simplificación administrativa. Calviño lo estudiará.

El presidente de la CEOE de Tenerife, José Carlos Francisco, consideró la visita de la ministra como de «cortesía y poco más». «Nos quedamos bastante igual», en referencia a la falta de concreción de los asuntos canarios. Francisco le planteó la «poca sensibilidad con el REF, que siempre han tenido todos los gobiernos de España, y este Gobierno en particular», expuso. En su opinión «no ha tenido respeto a nuestros fueros». Pero Calviño no respondió.