“Rodríguez-Jiménez y Asociados, y la ACB», artículo de Rony Martín (I)

El ex directivo del CB Canarias, socio-abonado y además accionista del Tenerife CB SAD, miembro de la Comisión de Seguimiento, ha remitido un nuevo artículo de opinión a BASKETMANÍA. Dado su extensión se ha dividido en dos entregas. Si alguna persona aludida en este artículo desea contestar o rectificar al señor Martín lo puede hacer enviando un correo a esta dirección: basketmania.arias@gmail.com y será publicado. El señor Rony Martín se resposabiliza de lo por él escrito, de la «A a la Z».

«El sino de los aficionados, socios y directivos del Canarias es sufrir, esperar, depender de otros, luchar en los despachos contra un sinfín de adversidades, y pasar de sorpresa en  sorpresa administrativas y deportivas, primero ante la falta de colaboración de los “Rodríguez-Jiménez y Asociados, entiéndase, de Valeriano Rodríguez, de Begoña Jiménez y de los miembros de los anteriores consejos, presididos entre otros por Frank Padrón, José M. Glez. Navarro, José Manuel Martín Fernández, Marcos Guimerá Peraza quienes supuestamente han apoyado desde la sombra a los primeros, y luego nos encontramos inmersos en una espera interminable a que la Asociación de Clubes se sirva dar o no el plácemet para que compitamos en la ACB.

No se ha cerrado el acuerdo con el Lucentum de Alicante, juega éstos a tres posibilidades y aún nos estamos tirando de los pelos por haber permitido a la  SAD “a quien Dios libre y guarde” que nos haya perjudicado en el deseo de subir con su CIF y con su canon, con toda la inquina inimaginable y con todos los despropósitos que han podido sustentar, pero, por lo que se ve, al no inscribirse en ninguna categoríua nacional, posiblemente su fin  -tal como está compuesta su infraestructura, va a sucumbir en el lodazal que ellos han creado. Se necesitó su CIF y su canon, eso es indiscutible, pero a estas alturas de nada nos hubiera servido pues tal como se rumorea no nos van a admitir, pero al menos , ya nada obliga a tener que aguantar sus mentiras, ni  a soportar sus ambiciones desmedidas, y menos a tener que permanecer estoicamente viendo como a lo largo de estos años han malversado unos dineros públicos que superan, según la prensa, más de tres mil millones de pesetas. Pero da igual que solo hayan sido trescientos o treinta, lo importante es su procedencia, que provienen exactamente de los impuestos, de tu dinero y del mío, y eso es imperdonable.

Hemos visto que, desde una fechas para acá, aunque intentaron enmascarar los resultados económicos de dos ejercicios consignado en el haber partidas que correspondían al saneamiento de la entidad deportiva y no a su Haber, ninguno de los consejos de administración que sucesivamente se han constituido han sabido, ni por asomo, salvo error u omisión, ajustarse a los presupuestos, sino todo lo contrario, han gastado todo cuanto se les ha venido en gana sin más respaldo que el Cabildo, alguna que otra empresa y lo que algún particular le hayan podido prestar, pero sálveme Dios de señalar a nadie, ellos sabrán quienes han sido los culpables.. Pero, eso sí, a partir de estas fechas ya no habrá más “mamadera pública” y mucho me temo que, si el Cabildo hace las cosas solo medianamente bien hechas a “Rodríguez -Jiménez y Asociados”, y a  algunos otros de los citados, puede ser que les  salpicara  algo, supongo yo.

Ahora cuando presumiblemente todo está pendiente de una resolución de la asamblea de los clubes, y que el Canarias deba esperar hasta el martes para saber si puede jugar con total garantía en la ACB, cabe echar la vista atrás sin rencor y analizar lo que ha sucedido y lo que pudo suceder, pero que  alguien se encargó de aguar la fiesta.

Pero me pregunto si creen ustedes que vale siquiera la pena de entrar en análisis pormenorizados de todas las acciones desleales, catalogadas así al menos, para no hacerlo de otra manera más dura e hiriente. No, yo no creo que valga la pena, más bien “daría pena” enumerarlas y eso, ni soluciona nada ni es lo que se pretende.

Con toda seguridad, después de que, posiblemente con muy buena intención, pero muy mal proyectado y pesimamente controlado, (porque de haber un mínimo control “otro gallo les cantara”, y después de contemplar como un equipo que surgió de la nada para erigirse como  máximo representante de la Isla de Tenerife, que llegó a militar durante dos años en la ACB, por mor de muchos culpables, de un lado y de otro, de la sociedad en sí y de quienes debieron hacer un seguimiento mas exhaustivo, que han dado como consecuencia que esa ruina económica de tal magnitud que ese equipo, salvo milagro divino, deba desaparecer.

Aunque catalogadas suavemente pues, insisto, ni recriminando a estas alturas se saca nada, ni yo soy nadie para hacerlo, sobre todo por aquello de que “quien esté libre de culpa que tire la primera piedra” y además porque reconozco que desde mi humilde atalaya, también pude haber hecho algo más, pero ya se sabe cual ha debido ser mi posición dentro de la Comisión de Seguimiento, que fue lo que fue y lamentablemente nada se sacó en claro como consecuencia de la tibieza aplicada por quienes debieron exigir el cumplimiento de las obligaciones pactadas y he aquí otro refrán aplicable  ”Ninguno la mató  y ella solita se murió”.

Se nos ha manifestado desde la máxima Institución Insular, que los técnicos del Cabildo van a acometer unas acciones tendentes a regular en profundidad todo lo concerniente a las subvenciones, al seguimiento que harán sobre las mismas y sobre la exigencia exhaustiva de las justificaciones en función a los motivos para los cuales se soliciten/concedan las subvenciones,  sin permitir ningún tipo de desviación, eso dicen que harán, pero por mi experiencia y por la profesión que desempeñé, eso me suena a canción repetida y a estribillo conocido, pero,  “nunca es tarde si la dicha es buena”, y bueno ha de ser que las instituciones se doten de los instrumentos necesarios para que, con toda efectividad, se lleven a cabo las comprobaciones que se estimen necesarias y que formen parte del condicionamiento que deba quedar reflejado en los documentos oficiales, tanto de solicitud como de concesión de subvenciones fijando claramente los motivos de revocación y/o devolución al Cabildo de los importes resultantes, en caso de que fuera preciso, a causa de cualquier incumplimiento injustificado de los concesionarios de subvenciones y ayudas.

Si, ya sé que a toro pasado es fácil proponer, pero en mi caso no lo es porque lo he repetido hasta la saciedad y mis manifestaciones han quedado recogidas en este Blog, pero da igual, lo interesante de todo esto es precisamente  que este asunto no vaya a caer en saco roto como tantas cosas y que una vez pasada la historia se olviden del tema. Tal como he manifestado mi intención no es recriminar a nadie por lo que haya hecho o dejado de hacer, mi intención es llamar la atención con mis humildes herramientas para que el Cabildo se ponga el traje de faena y a la mayor brevedad posible se cuente con tales condicionantes para la concesión de subvenciones.

No es una queja lastimera sino una simple mirada hacia la realidad el contemplar como las bolsas de pobreza cada vez se amplían más y más a consecuencia de tanto recorte a la parte más desfavorecida. No es un acto sentimental con visos caritativos a la vez, sino el análisis de una realidad patente ya que no es de recibo que se haya dilapidado toda esa magnitud económica de dinero público existiendo quienes no tienen para echarse a la boca ni un mal mendrugo de pan por culpa de no haber hecho un seguimiento adecuado.

RONY MARTIN

(SEGUIRÁ)