Agentes de la Ertzaintza miden la distancia desde la que ha sido arrojada la pequeña: unos 4 metros, un primer piso. Los vecinos cuentan que escucharon una fuerte discusión de madrugada que terminó pagando con la peor parte la criatura más indefensa. La pequeña sufrió traumatismo craneoencefálico grave y está ingresada en la UCI pediátrica del Hospital de Cruces.