Carles Puigdemont ha abandonado las dependencias judiciales belgas en libertad aunque con medidas cautelares. Su abogado ha salido a pie y tan solo se ha reído como respuesta a la pregunta de si estaba contento. El expresidente catalán y los cuatro exconsejeros que le acompañan en Bruselas no tienen que ingresar en prisión, siguen en libertad mientras la instancia judicial superior se pronuncia, lo que debe hacer en los próximos 15 días, sobre la petición de entrega de España.