Un expresidente del Gobierno que antes fue inspector de Hacienda, José María Aznar, intentando burlar el pago de impuestos. Aznar declaró parte de su actividad laboral en 2009 y 2010 a través de una sociedad que tiene con su mujer, Ana Botella. El objetivo era pagar un 25% de impuestos a través de sociedades, en lugar del 50% de impuestos que le correspondería por IRPF. Hacienda abrió una inspección a Aznar hace dos años. Considera que esos rendimientos son del trabajo y no de una empresa, por lo que le obliga a pagar los casi 200.000 euros que habría evadido en impuestos, más una multa de 70.400 euros, según informa OK diario. La Fundación FAES, presidida por Aznar, ha quitado hierro al asunto diciendo que se trata de una comprobación fiscal que se cerró con conformidad, es decir, pagando. La noticia sale a la luz después de que el expresidente mantuviese una reunión tensa con Cristóbal Montoro, según el diario. Hoy Montoro ha reconocido que se produjo este encuentro, que duró una hora, pero niega que Aznar le reprochase nada, dice que sólo hablaron de política.