En menos de 24 horas volverá a repetirse la imagen que hace unos días mostraban los medios de comunicación: la Infanta Cristina, por primera vez en la historia, sentada en el banquillo de los acusados. Mañana, la infanta será defendida por Pau Molins. Y cada acusado prepara su defensa: en el caso de Iñaki Urdangarín, el marido de la Infanta podría estar intentando recuperar los seis millones de euros que presuntamente defraudó para que le rebajen la condena.