Han llegado por separado pero dentro, Charo Porto y Alfonso Basterra se han tenido que sentar juntos en el banquillo. No se han dicho una palabra. Hace 9 meses que no se ven y el pacto entre los dos se ha roto. Esta semana la defensa de Alfonso ha dado un giro inesperado: descarga en Rosario la responsabilidad de las sedaciones y el traslado de asunta al lugar donde fue asesinada. El de hoy es el último trámite antes del juicio oral previsto en principio para el próximo octubre. El fiscal pide 18 años de cárcel para cada uno.