La denuncia de la policía ya está en el juzgado número 11 de Palma, donde se investiga la grabación del vídeo ilegal. Ignacio Cosidó, director general de la policía advierte de que desobedeceruna orden del juez es un delito, que además podría suponer hasta un año decárcel. Las sospechas se ciernen yasobre una sola persona, uno de los letrados presentes el sábado en la sala, yla tesis que barajan los investigadores es la de que se grabó desde unas gafasespía con cámara oculta.