Es un apretón de manos entre un ciudadano americano y un terrorista islámico. Así de sonriente aparece este joven en un vídeo publicado por los yihadistas en Siria: se prepara para llevar una bomba suicida. Estos son los momentos previos a la explosión. La prepara, y se la pone. Tranquilo y feliz, pocas horas antes de saltar por los aires, explica que aquí no tiene nada. Y que lo único que quiere es recibir la bendición de Dios e ir al paraíso. Estos son los puntos en los que se efectuarán distinas explosiones. Dentro de este camión se dirige al lugar elegido. Y allí, muere por su fe.