En Grecia, la coalición de gobierno, que se formó en junio, tiene dificultades para concretar un nuevo ajuste, exigido por la Troika e indispensable para recibir el rescate. Tras varias horas de reunión, la colaición de Gobierno ha optado por volver a reunirse a mitad de semana. La Troika, que fue recibida con protestas y abucheos de los griegos, exige nuevas medidas económicas que permitan recortar 11.500 millones de euros en 2013 y 2014, a cambio de un rescate financiero. Medidas, que conllevarán nuevos sacrificios para la población y provocan desacuerdos dentro de la coalición.