La agencia de calificación Standard and Poor's ha cumplido su amenaza y ha despojado a Francia de su máxima calificación crediticia, la triple A, según ha confirmado el Gobierno de Nicolas Sarkozy. Austria también se queda sin esa nota y baja del AAA al AA+. Podrían no ser las únicas, porque la agencia de rating amenaza con volver a rebajar la nota a España, Italia y Portugal. Solo Alemania, Luxemburgo, Holanda y Finlandia pueden presumir, todavía, de mantener esa triple A.