Reformas políticas, empleos y mejores salarios. Es lo que demandan los manifestantes omaníes. Quieren ver en su bolsillo los beneficios de su rico país. Por eso, han salido a la calle, han bloqueado la carretera que va hacia el principal puerto exportador y refinería del país. La policía se enfrentó a los manifestantes con gases lacrimógenos y pelotas de gomas. Según la Policía, las revueltas se han cobrado seis vidas en el sultanato del Golfo Pérsico.