Guindos dice sí a sentarse junto a Mario Draghi. Y da por hecho que la vicepresidencia del BCE es suya, que tiene los suficientes apoyos en Europa. Pero no cuenta con el respaldo del PSOE, que quería para ese puesto a una mujer. Tampoco de Podemos. De Guindos seguirá de momento de ministro, si se va al BCE obligará a Rajoy a una remodelación de Gobierno. El Eurogrupo decide en dos semanas.