Los empresarios son optimistas. Creen que en los próximos años se podrían crear más de 2 millones 300.000 empleos si se aplican sus recetas, empleos que reducirían la tasa de paro 10 puntos. Cuentan con la recuperación económica pero la receta, dicen, está en la creación de nuevas empresas, que además miren al exterior. Harían falta 15.000 más hasta 2018. A esto hay que añadir reformas educativas que acerquen las aulas al mercado laboral y lucha contra el fraude que haría aflorar 800.000 empleos.