El seis veces campeón olímpico Usain Bolt se relajaba ayer bailando samba junto a un grupo de niños de una de las favelas más pobres de Rio en la playa de Copacabana. Junto a ellos, el velocista jamaicano corrió por la pista construida sobre la arena de esta turística playa y no dudó en participar en otro clásico brasileño: el footvolley.