Así es el 'efecto Ikea'

Esta manipulación psicológica puede influirte hasta para conseguir pareja

Así es el 'efecto Ikea'

Así es el 'efecto Ikea'

¿Sabes lo que es el 'efecto Ikea'? Quizás pienses que esté relacionado con el consumo y la compra de muebles en la conocida multinacional sueca y, aunque algo tiene que ver, no está tan vinculada como imaginas.

El llamado 'efecto Ikea', en psicología, está relacionado con el interés de crear o construir algo, como ocurre con los muebles de Ikea, que finalmente son 'construidos' por el propio cliente. Esto aporta mucho más valor al producto final que si se compra montado o lo instala un profesional.

En la actualidad, por ejemplo, está muy de moda regalar experiencias. Y, si lo miramos bien, comprar un mueble de Ikea es también toda una experiencia, porque no solo se lleva a cabo una transacción económica a cambio de un bien material, sino que este hay que emplearse a fondo para obtener el resultado final. De esta manera, lograr el objetivo final es aún más satisfactorio.

'Efecto Ikea'

'Efecto Ikea'

Vida personal

Aunque este conocido efecto tenga su partida en la adquisición de mobiliario, hay una parte esencial que se ha trasladado a la vida personal. En este sentido, el efecto sería el mismo, es decir, una relación que conlleve más esfuerzo resultará más atractiva para la persona en cuestión.

Sería típico: "que se lo curre", trasladado a una premisa de marketing comercial. O, lo que es lo mismo, que tiene más valor para una persona aquella otra que ha hecho un esfuerzo por mantener una relación.

'Efecto Ikea'

'Efecto Ikea' / EDUARDO PARRA / EP

La razón

Si nos referimos a la situación de montar un mueble, el 'efecto Ikea' se entiende por su sentido de autorrealización y autoeficiencia. Somos capaces de montar nosotros solos un mueble y eso nos satisface mucho más.

'Efecto Ikea'

'Efecto Ikea'

Mientras que en sentido sentimental, puede estar más relacionado con lo que valoramos las experiencias o lo que vivimos con determinadas personas.

Aunque, en ambos casos, es necesario tener en cuenta que hay que encontrar un equilibrio y no dejarnos llevar por el 'efecto Ikea' sin más. Debemos valorar la situación y quedarnos con aquello que realmente nos haga sentir bien, sin dejarnos llevar por las falsas expectativas.