A partir de ahora va a ser más difícil librarse de una multa si se sobrepasan los límites de velocidad en Los Realejos, en especial en las carreteras que acumulan mayor problemática. La Policía Local del municipio norteño adquiere un radar móvil para realizar controles en las vías después de haber reforzado sus medios con un dron de vigilancia, dispositivos de drogotest y etilómetro y un vehículo de atestados. El alcalde realejero, Adolfo González, y la concejala de Seguridad y Emergencias, Carolina Toste, informaron ayer de que esta acción va acompañada de la formación que han recibido durante esta semana una decena de agentes de Policía Local de Los Realejos para su correcto uso.

El dispositivo ha realizado pruebas en aquellas carreteras en las que los vecinos han transmitido su preocupación ante frecuentes excesos de velocidad. El alcalde apuntó que «son varias las vías y calles de Los Realejos, especialmente en áreas urbanas, sobre las que la ciudadanía nos comenta este tipo de situaciones, con lo que esta medida pretende garantizar la seguridad en la conducción y de los peatones, el descanso vecinal y, al mismo tiempo, hacer un estudio de velocidades medias de cada vía. Asimismo se llevarán a cabo controles de ruidos».

Carolina Toste avanzó, por su parte, que se llevarán a cabo distintas campañas de seguridad vial de manera aleatoria en diferentes puntos del municipio, donde estarán presentes agentes del cuerpo de Policía Local de Los Realejos con este dispositivo de control de velocidad. Añadió que «se atiende así a una demanda vecinal y no se persigue un afán recaudatorio, sino seguir poniendo en marcha medidas que sirvan de garantía del cumplimiento de las normas de circulación del tráfico, evitar accidentes y, en definitiva, promover la seguridad de las personas».

La concejala de Seguridad y Emergencias incidió en «la necesidad de seguir dotando al cuerpo de Policía Local de medios para que puedan desarrollar con mayores prestaciones y efectividad su labor». Carolina Toste destacó la adquisición reciente de distintos equipamientos, además de los relacionados con los controles de velocidad, como lectores de microchips de mascotas y el programa policial Eurocop, un sistema informático de gestión policial.