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El nuevo alcalde de Los Realejos se compromete: "No les defraudaré"

Los 15 votos del Grupo Municipal Popular permitieron que se concretara el relevo de Manuel Domínguez

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Adolfo González, nuevo alcalde de Los Realejos. Carsten W. Lauritsen

Adolfo González Pérez-Siverio (PP) se convirtió en la mañana de este sábado 11 de junio de 2022 en el nuevo alcalde de Los Realejos, en sustitución de Manuel Domínguez, que en la misma sesión renunció al cargo de edil en la corporación para centrarse en su papel como presidente del PP en Canarias y futuro candidato a la Presidencia del Gobierno regional. Adolfo González resultó elegido gracias a los 15 votos de los 15 concejales del Grupo Municipal Popular tras pedir la confianza de sus compañeros de corporación y de sus vecinos. «No les defraudaré», aseguró minutos antes de levantar el bastón de mando con una mano sobre el corazón.

Adolfo González es el nuevo alcalde de Los Realejos.

Adolfo González es el nuevo alcalde de Los Realejos.

El nuevo alcalde realejero juró el cargo y recibió el bastón de mando a las 11:10 horas. Sus primeras palabras fueron de agradecimiento a su madre María Teresa, a su padre Pedro, a su compañero Andrés y al resto de su familia y los amigos. A sus compañeros de partido, al personal municipal, a las autoridades presentes, al resto de la corporación y a los realejeros y realejeras, a los que invitó a «usar la puerta de la Alcaldía, que estará siempre abierta». Se comprometió a seguir trabajando por «un Realejos mejor, del que seguir sintiéndonos orgullosos y afortunados».

Adolfo González también tuvo palabras para su antecesor en el cargo, Manuel Domínguez, al que dijo que le debe «todo lo que sé y todo lo que soy en política». Insistió en la importancia de su equipo de gobierno, a los que agradeció su apoyo con un mensaje de unidad: «Juntos somos más fuertes». Antes ya había dejado claro que «gestionar con honestidad y eficiencia el dinero de los impuestos de los realejeros será religión para este equipo» y que, entre sus prioridades, están la atención a las personas más vulnerables; los niños, los jóvenes y los mayores; la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación (PGO) y la ejecución de los proyectos pendientes; mantener «unos servicios públicos de primera línea», o lograr «un municipio bonito para vivir e interesante para invertir».

Respecto a la localidad por la que trabajará a partir de ahora desde la Alcaldía, González abogó por que sea «diversa, tolerante, abierta, equitativa, moderna, viva y dinámica». Ante sus vecinos se comprometió a ser «su primer servidor», «sin privilegios» y «sin cobrar un sueldo de esta casa», ya que continuará percibiendo su remuneración como docente de la Consejería regional de Educación.

«A Manuel Domínguez le debo todo lo que sé y todo lo que soy en política»

Adolfo González (PP) - Alcalde de Los Realejos

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Antes de la proclamación de Adolfo González, el cabeza de lista del PSOE, Miguel Agustín García, recibió cuatro votos de su grupo. La única edil de CC-PNC, Isabel Pérez, se quedó con un único voto. El líder socialista pidió, sin éxito, la confianza de la corporación para impulsar un municipio más «tolerante, conciliador, plural, eficaz, eficiente y atractivo para la inversión». Y se mostró como alternativa de Gobierno en Los Realejos al enumerar muchas de las propuestas que el PSOE ha defendido en este mandato. Isabel Pérez solicitó a la presidencia que mantuviera el orden por algunos comentarios y abucheos del público durante un discurso que fue muy duro, con fuertes críticas al gobierno del PP, al que comparó con La Nada de la novela La Historia Interminable, de Michael Ende

La presidencia del pleno recayó en Noelia González Daza (PP), la mujer que durante años también sonó como posible relevo de Domínguez al frente de la Alcaldía. Después de que la edil de CC la animara en su discurso a disputar el bastón de mando a su compañero en el PP, Noelia González quiso transmitir un mensaje de unidad y de apoyo: «Lo harás bien porque estás preparado; conoces a este pueblo, a su gente y a esta administración, y cuentas con un equipo excelente. Y también cuentas con mi apoyo y mi lealtad para seguir trabajando a tu lado».

El ya exalcalde y exedil de Los Realejos Manuel Domínguez reconoció que este sábado ha sido «un día importante en el que he sido un hombre feliz al ver que mi gente triunfa. Adolfo es amigo y durante estos últimos años, prácticamente desde 2006, hemos trabajado juntos y por eso sé que Los Realejos queda en las mejores manos. Le deseo todo el éxito del mundo».

La elección y juramento del cargo de alcalde se desarrolló en un abarrotado salón de plenos, con varias pantallas en el exterior. Entre los asistentes, el senador Antonio Alarcó (PP); el diputado nacional Sebastián Ledesma (PP); el diputado regional Poli Suárez; los alcaldes de Puerto de la Cruz, Marco González (PSOE), y Santiago del Teide, Emilio Navarro (PP); el director insular de Carreteras, Tomás García; la consejera insular Zaida González (PP), o el coordinador insular del PP tinerfeño Lope Afonso.

El primer discurso del nuevo alcalde

Estimados compañeros de corporación, autoridades que nos acompañan en esta mañana, señores diputados y senadores nacionales, diputados regionales, consejeros del Cabildo Insular de Tenerife, alcaldes, representantes de los cuerpos de seguridad del estado, Sra Jueza de Paz, Medallas de Oro de la Histórica Villa de Los Realejos, representantes de los trabajadores y trabajadoras de esta casa, señores párrocos de este municipio, representantes de la sociedad civil realejera, vecinos y vecinas de Los Realejos, Buenos días.

Son las manos de una madre las que nos atienden y nos cuidan desde la cuna, vigilantes siempre de nuestro bienestar más amplio y hasta de nuestros sueños. Son sus manos las que velan y trabajan de manera incansable para que a los hijos y a las hijas no nos falte de nada, ni el alimento, ni el confort del hogar, ni la educación o la seguridad necesarias, ni el derecho incluso a soñar por un porvenir mejor, de futuro y esperanza. De esas manos se aprende y se cultiva, y de esas mismas se impregna uno de la vocación de servicio a los demás, del ejercicio público y de todo lo que conlleva trabajar y dedicarse por completo para que quienes te rodean puedan vivir un poco mejor cada día, entendiendo que cada uno de nosotros podemos poner de nuestra parte para que así sea.

Permítanme que las primeras palabras en este día tan importante para mí y para el Pueblo que quiero sin condiciones vayan para quien en estos últimos meses sigue librando su particular batalla con la vida a manos llenas, para quien me ha enseñado desde chico que lo mejor que puede hacer uno en su vida es hacer más agradable la vida de los demás, que todo requiere disciplina y mucho esfuerzo, que cuántas más manos hagan cosas juntas a más personas podemos hacer felices, que la honestidad y la generosidad son nuestra mejor carta de presentación para cualquier faceta de nuestra existencia, en cualquier lugar y en el ejercicio de nuestro trabajo.

Aquí me presento hoy para seguir trabajando con las manos y las lecciones que ella y mi padre me han dado en herencia, su mejor legado y mis únicas herramientas. Se llama María Teresa, y forjó lo que ustedes tienen delante. Si me estás escuchando…Gracias por enseñarme tanto a manos llenas.

Gracias a mi familia y a mis amigos por su apoyo incondicional desde el primer día, y Gracias infinitas a Andrés, mi compañero de viaje por compartir mis alegrías y desvelos, y que con tu magia haces que esta aventura sea de los dos, un viaje compartiendo el peso del equipaje. Te quiero.

Hoy comienza una renovada etapa al frente de este ayuntamiento y del Municipio de Los Realejos al que he dedicado los últimos 15 años, años que me han permitido conocer de cerca y gestionar buena parte de las áreas que conforman esta Casa Común de todos los realejeros y realejeras pilotado por quien, hasta hace unos días, ostentaba la alcaldía-presidencia y a quien le debo todo lo que se y todo lo que soy en política. Gracias Manuel Domínguez, amigo Manolo, por tu confianza en mí desde el primer día y tu insistencia para que diera el paso en este apasionante viaje de la política local. Gracias amigo por tu generosidad y por creer en mí, por lanzarme a este mar de calmas y turbulencias para nadar sin instrucciones, pero siempre con tu flotador a mano. También contigo estuve y sigo estando en buenas manos.

Gracias a mis compañeros y compañeras concejales de este y anteriores mandatos. Los grandes equipos forjan lazos no solo para el éxito laboral, lo hacen para sellar alianzas duraderas de respeto, admiración y cariño. Qué suerte tiene Los Realejos de tenerlos cada día haciendo que nuestras vidas sean más agradables, mejores, y que este municipio haya dado pasos de gigante en apenas unos años. Yo soy su equipo, soy yo por y para ustedes. No se cómo agradecerles su confianza plena desde el primer día. Ahora más que nunca sé que Juntos somos más fuertes. Les quiero.

A la Familia del Partido Popular de Los Realejos por su empuje y convencimiento de que este proyecto político es el mejor para el municipio, lo ha sido y tiene mucho futuro por delante. Nuestro programa político siempre ha tenido claro que solo el interés general y el bienestar de nuestra gente, de nuestros barrios, del conjunto de nuestro Pueblo es el objetivo primero y el último. Hemos venido a servir. Gobernamos para todos y todas, sin distinción alguna, con especial atención y sensibilidad a las familias que necesitan más apoyo de los recursos públicos, de forma solidaria y equilibrada entre los barrios, haciendo de este terruño un lugar bonito para vivir e interesante para invertir. Sacar lo mejor de nosotros mismos seguirá siendo nuestra mejor carta de presentación y nuestro mejor aval de futuro.

A los trabajadores y trabajadoras de esta Casa, por ser motor y el combustible, por su profesionalidad, por tender siempre puentes y manos con ganas de hacer. Y además hacer siempre con excelencia. Siempre nos han tratado muy bien, cordiales, amables. Se que con su entrega seguiremos también en buenas manos.

A los compañeros de la oposición, somos 21. Al margen de las diferencias programáticas y políticas siempre hemos hecho de este salón de plenos y de nuestra encomienda común espacios para el encuentro, desde del debate y la confrontación de ideas, pero también desde el respeto y la cordialidad necesarias. Los realejeros deben sentirse orgullosos de nosotros, siempre hemos sido ejemplo del exquisito ejercicio de nuestras responsabilidades, sin aspavientos, enfrentamientos viscerales ni comportamientos impropios de cualquier representante público. Sé que cuento con sus manos, aquí tienen las mías.

Pero sin duda a quien debo el mayor de los agradecimientos en el día de hoy es al Pueblo de Los Realejos, a los vecinos y vecinas, al amplísimo tejido social, cultural, deportivo, del tercer sector, empresarial y asociativo, que son quienes dan sentido a todo lo que está por venir. A todos y todas me dirijo en estos momentos. Con cada uno de ustedes sello hoy un compromiso, más fuerte si cabe, de ser su primer servidor. Ostentar la alcadía-presidencia de su municipio no será, ni entendida ni utilizada, como un privilegio, ni merecedora de tratos de honor. No los quiero. Yo no he venido a eso y quien me conoce bien lo sabe. Todo lo contrario. Y tampoco un sueldo, un salario de esta casa, seguiré como hasta ahora con las retribuciones de profesor por la Consejería de Educación.

Ser su alcalde es una gran mochila de responsabilidad fruto de la confianza que me han dado en préstamo para llevar por buen camino los designios de su municipio. Aquí vive y trabaja mi familia, mis amigos, tantas y tantas personas a las que quiero y admiro, y porque es el lugar en el que quiero seguir viviendo hasta mis últimos días con la mejor calidad de vida posible juré hace unos minutos que haré todo lo que esté de mi mano y más para hacer de Los Realejos el mejor lugar donde vivir en tranquilidad, con expectativas, oportunidades y esperanza de futuro. Un Realejos mejor del que sentirnos orgullosos y afortunados. A ustedes mis vecinos. Gracias por su trato durante todos estos años, por enseñarme, y por comentar, aportar, pedir, solicitar, quejarse… eso es hacer política de a pié, como debe ser, y como quiero que siga siendo. Cuento con todos para este camino que hoy comenzamos…de la mano.

La puerta de la alcaldía está abierta, es suya. Úsenla, crúcenla, denle sentido de verdad a todo esto. En las calles, en una plaza, en torno a un café o una mesa me encontrarán…para contarnos. Gracias a todos y todas de antemano por su apoyo y su cariño, y en el error y las equivocaciones, admitan mis disculpas de antemano. Errar es humano y del error yo también aprendo cada día.

Decía José de Viera y Clavijo "Qué admirable espectáculo el del cielo en el silencio de una noche clara! Qué magnificencia la de tan innumerables puntos radiantes que con tan bello orden forman sus varios giros y anuncian la gloria de Dios!".

Para mí Los Realejos es mi cielo, y su magnificiencia, sus puntos radiantes, son cada uno de los realejeros y las realejeras. Yo pondré todo de mi parte. Si ustedes quieren, seguiremos brillando.

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