San Miguel de Abona puso en servicio un espacio singular diseñado y creado para el disfrute del tiempo de paseo con las mascotas. La localidad de Guargacho alberga un parque canino, un área de esparcimiento para esta especie integrada en el entorno urbano de la zona sanmiguelera de este núcleo parcialmente ubicado en Arona, también. El proyecto fue pensado y diseñado con la finalidad de que “los perros puedan correr y relacionarse, ayudando a mantener así la salud tanto física como mental del animal a la vez que sus propietarios se relacionan entre sí y pueden disfrutar en un entorno seguro, ameno y controlado”.

El alcalde, Arturo González, recuerda que San Miguel de Abona apuesta por grandes espacios públicos especialmente habilitados para perros. “Con este son dos grandes parques los que tiene el municipio, puesto que el pasado año se procedió a inaugurar el parque canino de Llano del Camello”. De la importancia y justificación de este tipo de equipamiento da fe el hecho de que por el recinto de Llano del Camello pasan a diario “muchísimas familias que van a disfrutar de su mascota en este entorno”.

Por su parte, Julián Martín, concejal de Servicios Públicos, hacía hincapié en que ambos parques responden a las demandas planteadas por la población. Al tiempo, adelantó que ya están en marcha los trabajos correspondientes al tercer recinto para perros con que se dota el municipio, cuya construcción se lleva a cabo en la zona de Las Chafiras. Esta obra, cuyo coste asciende a 60.000 euros, se desarrolla en una superficie útil de 1.500 metros cuadrados y su financiación ha sido asumida en su totalidad por el Consistorio sanmiguelero. En ella se incluye el cerramiento del espacio, la siembra de árboles y la dotación de mobiliario específico para las actividades de agilidad, fuerza y obediencia (Agility).

San Miguel de Abona es el municipio que más crece demográficamente y el alcalde entiende que ello requiere de respuestas en materia de servicios esenciales y en los especiales, también. En estos incluye el caso de los parques para perros, que, desde la perspectiva del gobierno local, contribuye a crear “un lugar atractivo para vivir que poco a poco ha ido incorporando servicios e infraestructuras que permiten tanto el crecimiento sostenible como crear recursos necesarios para impulsar y mejorar nuestra calidad de vida”. Algo en lo que juega tiene un papel esencial “la colaboración vecinal, puesto que el mantenimiento y limpieza de nuestros espacios depende de todos”.