La entrada en vigor del nuevo paquete de medidas impulsado por el Gobierno del Estado para frenar la propagación del coronavirus ha supuesto la restricción de vuelos de ámbito interinsular y nacional, un hecho que ya desde el sábado se ha dejado notar en el aeropuerto Tenerife Norte, en donde se produjo una reducción significativa de pasajeros.

En este caso, en las filas de facturación las colas eran escasas y en la puerta de entradas la tranquilidad solo se vio alterada en las horas en los que los escasos vuelos tomaban tierra.

Si hasta el viernes las conexiones interinsulares permitidas ascendían a 18, el sábado entraba en vigor la reducción de vuelos, pasando a diez idas y diez vueltas, casi la mitad del servicio en Canarias. A ello hay que añadir que se ha limitado a la mitad el aforo cada viaje hasta la mitad.

En concreto, y solo desde la infraestructura lagunera, entre Gando (Gran Canaria) y Tenerife Norte hay habilitadas tres conexiones de ida y vuelta; una con Fuerteventura; dos diarias con La Palma y una con El Hierro, dejándose el servicio con La Gomera y Lanzarote.

En cuanto a los vuelos nacionales, las conexiones permitidas son dos a Madrid y Barcelona; y una a Bilbao y Sevilla; apuntes todos que explican el escaso número de pasajeros.