En Puerto de la Cruz están acostumbrados a imaginar un futuro mejor con grandes proyectos que, por diferentes razones, no terminan de hacerse realidad. La espera dura siglos cuando se habla del nuevo muelle; décadas en los casos de la ampliación del Jardín Botánico o la reapertura del hotel Taoro, o años cuando toca hablar del Parque San Francisco, la playa de Martiánez, la nueva piscina o la reforma de la TF-312, la principal carretera del casco urbano, que se planteó en 2017 y se presentó en febrero de 2019. La reforma integral de la vía que conecta Las Arenas con el Botánico, a lo largo de 5 kilómetros, es la última gran obra pendiente en la ciudad turística.

Tras una denuncia pública por la existencia de grandes grietas en parte de los muros del enlace o pulpo de Las Cabezas, el gobierno local (PSOE-ACP) desveló que, pese a que la actuación se presentó hace 11 meses, los anteriores gobiernos del Cabildo de Tenerife y del Ayuntamiento portuense nunca firmaron el convenio necesario para que el desarrollo de la obra empezara a concretarse.

El que fuera edil de Urbanismo de la ciudad turística en el mandato anterior y actual secretario general de CC en el municipio, Juan Carlos Marrero, asegura a EL DÍA que el convenio necesario sí quedó listo para la firma en mayo de 2019.

"Me asombra leer que desde mayo, que quedó todo concretado, y desde el 15 de junio, fecha de la llegada del nuevo gobierno (PSOE-ACP), no ha sido hasta el 18 de diciembre cuando se han sentado a hablar de la TF-312 -lamenta-. Ya se tenía que haber aprobado el convenio en la junta de gobierno local y en la comisión de gobierno insular, y deberían estar trabajando en las expropiaciones y en todo lo necesario para comenzar la primera fase. Se trata del tramo que incluye la demolición y construcción del nuevo pulpo de Las Cabezas, así como las rotondas del edificio Belair y de Las Cabezas con la avenida Blas Pérez González, que harían desaparecer los semáforos actuales".

El ex edil de Urbanismo recuerda que este proyecto surgió en 2017, tras encontrarse grietas en la estructura del enlace de Las Cabezas. "Una vez detectadas, el área de Carreteras del Cabildo y la Concejalía de Urbanismo comenzamos a trabajar en el proyecto de reforma integral de la vía, un proyecto ambicioso que inicialmente se valoró en 15 millones de euros, pero que terminó superando los 30", señala.

La aparición de las grietas

La aparición de las grietas fue comunicada en 2017 al Cabildo de Tenerife, "administración que se comprometió a hacer no solo los informes necesarios sino un seguimiento técnico, ya que aún se trata de una carretera insular".

Tras las últimas denuncias públicas por el estado de algunas de esas grietas, el Ayuntamiento portuense ha solicitado nuevos informes, cuando se cumplen casi tres años de su detección, sin que aún se hayan tomado medidas correctoras o de seguridad.

Marrero explica que "el año 2018 se destinó a trabajar, junto a Gestur, en todos los detalles necesarios, no solo para el proyecto de las vías, sino también las expropiaciones, las titularidades de los terrenos y las reuniones técnico-políticas, también con el Consorcio portuense, ya que parte de los terrenos estaban incluidos en el PMM de julio de 2015. Además se estudiaron todos los aspectos que podrían mejorar no solo la imagen final sino también la seguridad peatonal y vial de toda la TF-312".

En aquel momento, el Ayuntamiento portuense renunció al convenio firmado en 2015 para la recepción de las vías insulares, llamadas a convertirse en vías locales, "para lo que se inició un nuevo convenio que fijaba, por ejemplo, las obligaciones de ambas partes o los documentos necesarios. Y un aspecto fundamental, al margen de las aportaciones económicas de cada administración: una vez finalizado el proyecto global, la vía pasaría a ser municipal".

"Ese convenio quedó cerrado entre ambas administraciones en mayo de 2019 -insiste Marrero-, dos meses y medio después de haber presentado el proyecto global, valorado en más de 32 millones de euros, de los que el Cabildo de Tenerife se comprometía a poner más de 20".

Marrero se muestra ahora muy crítico con la falta de avances en los primeros siete meses del nuevo mandato: "Seguramente para el actual gobierno no sea una prioridad. El actual concejal seguirá organizando el área, lo que le ocupa desde hace ya siete meses, y para el presidente insular y el consejero Arriaga la TF-312 será, probablemente, otro proyecto faraónico que el Puerto de la Cruz no merece. Así podrán destinar los más de 20 millones comprometidos nuevamente a algo del Sur de Tenerife, como ya han hecho con los 70 millones del muelle".

Fuentes del gobierno portuense (PSOE-ACP) aseguraron esta semana a EL DÍA que tratan de "acelerar todo lo posible para concretar en unos meses la firma del convenio para las sucesivas fases de las obras, ya que a pesar de que el expresidente insular Carlos Alonso (CC) y el exalcalde Lope Afonso (PP) anunciaron las actuaciones, no firmaron convenio alguno".

La firma de ese acuerdo se abordará, según informa el gobierno portuense, en una reunión prevista con el Cabildo el próximo día 15.

La actuación en la TF-312 se divide en cinco tramos: la avenida Marqués Villanueva del Prado entre la TF-31 y el cruce con las calles Camelia y Retama (6 millones de euros); de la calle Camelia a la Punta de la Carretera (5,3 millones); del edificio Belair hasta la avenida Blas Pérez, con el enlace de Las Cabezas (9,5 millones); de Blas Pérez hasta la rambla del Profesor Antonio González (5,8 millones), y de la citada rambla al cruce con la TF-320 (unos 5 millones).