El Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación del Puerto de la Cruz inaugurará el próximo jueves el primer gran parque inclusivo de Tenerife. Se trata de un parque infantil pensado y adaptado para el disfrute de menores con y sin diversidad funcional. Una apuesta por la accesibilidad universal y la inclusión total que ha requerido 21 meses de obras y una inversión de 667.000 euros. Este nuevo espacio público de 6.000 metros cuadrados, construido sobre el antiguo y deteriorado parque El Laurel, en La Paz, aspira a convertirse en un referente para el ocio infantil y familiar, con especial atención a los menores con diversidad funcional, pero sin ningún tipo de exclusión. No es un parque específico para menores con alguna dificultad, es un parque para todos.

A los juegos adaptados se suman otros servicios como las plazas de aparcamientos reservadas para personas con diversidad funcional, áreas de descanso y lectura, y mesas para pícnic. El proyecto ha evitado la instalación de elementos específicos para personas con diversidad funcional, de manera que todos los juegos son accesibles, sin diferencias, exclusiones ni elementos diferenciadores. También se ha tratado de evitar, en lo posible, el juego individual. Los redactores del proyecto han tratado de evitar las típicas colas de espera por un columpio libre. Por eso han apostado por columpios con capacidad para varios niños a la vez e, incluso, adaptados para el uso compartido entre adultos y niños. Los toboganes también están adaptados, por su anchura, para que lo utilicen varias personas a la vez, y también adultos en compañía de menores.

El parque tiene un recorrido interno que facilita el juego grupal y en movimiento, en un espacio con texturas y colores adaptadas al entorno natural y que ayudan a diferenciar zonas de juego y descanso. Este proyecto va a suponer un aumento de afluencia de público a una zona que hasta ahora no era demasiado visitada, lo que contribuirá a dinamizar la actividad social y económica el entorno.

Zona de gran valor ambiental

El espacio donde se ha construido este parque es de gran valor ambiental por la diversidad y el gran porte de la vegetación que existía y que se respetó en gran medida. Todo el diseño del parque se adaptó en torno a los árboles sanos de la zona, lo que permite aprovechar su sombra y ofrecer una imagen conjunta de espacio verde y agradable.

La elección del mobiliario ha sido una de las claves de este proyecto, ya que se ha adaptado a una topografía muy singular, que incluye juegos de estimulación sensorial y cognitiva. Todos los accesos al parque de El Laurel se han adaptado a personas con movilidad reducida, por lo que existe una plataforma única al mismo nivel, con señalización y líneas que indican los accesos a los diferentes usos dentro de este novedoso espacio de ocio. En el diseño de esta primera experiencia de gran parque inclusivo han colaborado entidades como Sinpromi, Asmipuerto, Visión Azul, la Plataforma por un Puerto Accesible y Diverso, y la Asociación de Vecinos de La Paz.