Dos adolescentes caen a un pozo de diez metros en un molino de Canarias

La pareja, de 17 y 16 años y herida de gravedad, se precipitó al interior de las antiguas salinas de Arrecife

Los bomberos tardaron tres horas en culminar las labores de rescate

Los bomberos del Consorcio de Emergencias de Lanzarote rescatan a dos adolescentes que cayeron a un pozo en Arrecife.

Los bomberos del Consorcio de Emergencias de Lanzarote rescatan a dos adolescentes que cayeron a un pozo en Arrecife. / C. A. C.

C. Barcala

Buscaron un sitio íntimo, cerca del recinto ferial en el que celebraban el carnaval pero lo suficientemente alejados de miradas indiscretas, y llegaron hasta un molino de las antiguas salinas de Puerto Naos, en Arrecife (Lanzarote). El reloj no marcaba todavía la medianoche del lunes cuando la pareja cayó a un pozo de más de diez metros, de donde tuvieron que ser liberados por Bomberos del Consorcio de Emergencias de Lanzarote, que tardaron tres horas en rescatar a las víctimas (un varón de 17 años y una mujer de 16) del interior del molino.

«Subieron al muro del molino creyendo que era un habitáculo cerrado porque estaba todo a oscuras, sin iluminar, no veían nada, no se veía el fondo», cuentan a EL DÍA fuentes del consorcio. Pero los dos jóvenes se equivocaron. «Él decidió entrar en el molino, pensando que tenía suelo, pero cayó los diez metros. Al oír el ruido, el grito de la caída, ella se asustó y fue a buscarlo, y también se precipitó», añaden las mismas fuentes de emergencias consultadas por este periódico.

El joven impactó contra el suelo del pozo del molino, situado entre diez y doce metros de profundidad; su pareja quedó tendida encima de él, que le amortiguó la caída. «El impacto del chico fue muy fuerte. Cayó a plomo. Lo que nos preocupan son las heridas internas a consecuencia del golpe», afirman. Tal y como informaron desde el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112 del Gobierno de Canarias, el menor presentaba, en el momento inicial de la asistencia, un traumatismo craneoencefálico de carácter grave y tuvo que ser trasladado en una ambulancia medicalizada del Servicio de Urgencias Canario (SUC) hasta el hospital Doctor José Molina Orosa; ella, por su parte, sufrió un politraumatismo también grave y está ingresada en el mismo centro hospitalario. Ambos se recuperan de las heridas.

«Tras la caída perdieron la memoria, se quedaron durante unos instantes inconscientes, pero fueron ellos mismos los que lograron llamar al 112 para pedir ayuda», cuentan las fuentes consultadas. Hasta las salinas acudieron, a las 23.38 horas del lunes, efectivos del consorcio, SUC, Policía Local, Autoridad Portuaria, Protección Civil y Policía Nacional. Además, un coordinador del SUC de guardia realizó teleasistencia a los jóvenes indicándoles cómo debían actuar hasta la llegada de los servicios de emergencias.

«Cuando llegaron, él estaba por momentos consciente. Se le iba y le volvía la conciencia. Los bomberos llegaron pronto porque estaban por la zona, en el dispositivo de carnaval», continúan. El rescate, en total, se alargó tres horas y, para realizarlo, los bomberos descendieron al interior del pozo y los inmovilizaron con una camilla nido, hasta conseguir rescatarlos en vertical debido a la estrechez del interior del molino: «Por suerte se quedó en un accidente y un susto».