Entra en prisión por intentar matar a puñaladas y arrancarle parte de la oreja a un joven en Las Galletas. El Juzgado de Instrucción número 1 de Arona decretó el ingreso en prisión preventiva del hombre de 41 años de edad, de nacionalidad venezolana, que fue detenido durante la noche del pasado domingo como presunto autor del apuñalamiento sufrido por un joven de 26 años en la madrugada del 27 de febrero en la localidad costera de Las Galletas.
El citado individuo fue arrestado por agentes de la Unidad de Prevención Policial (UPP) de la Policía Local de Arona y puesto a disposición de la autoridad judicial en la mañana siguiente.
La jueza decretó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza como presunto autor de los delitos de homicidio en grado de tentativa y lesiones agravadas. Según algunas fuentes, la víctima, también de origen venezolano, recibió unas 14 heridas punzantes, la mayoría en la espalda. Y el presunto autor utilizó en su ataque un destornillador. Y, además, le arrancó parte de la oreja con un mordisco. El personal de la ambulancia que lo atendió procedió a su traslado inmediato al área de Urgencias del Hospital Universitario Nuestra Señora de la Candelaria (Hunsc).
La violenta agresión se produjo a la 1:30 horas del domingo en la calle María del Carmen García, en pleno centro de Las Galletas, según informó el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) varias horas después.
Los profesionales de la Unidad de Prevención Policial (UPP) tuvieron conocimiento del suceso, en el que el joven sudamericano había recibido varias puñaladas por la espalda con un destornillador y, además, le habían seccionado parte de la oreja izquierda.
Los integrantes de este grupo de intervención acudieron hasta una finca de plátanos situada entre la localidad de El Fraile y el núcleo de La Estrella, aproximadamente a un kilómetro y medio del lugar en el que se produjo el suceso. Los policías locales recibieron información de que el presunto autor podía estar escondido en dicha explotación agraria.
Ante la posible reacción violenta del individuo, los componentes de la UPP estaban preparados para actuar con el arma de fuego reglamentaria y el dispositivo eléctrico de control (pistola táser), aunque no llegaron a utilizar ninguno de dichos medios.
Tras ser apresado, el individuo fue trasladado hasta las dependencias del puesto principal de la Guardia Civil en Playa de las Américas.
Y, a la mañana siguiente, agentes del Instituto Armado trasladaron al apresado hasta el Juzgado de Instrucción número 1 de Arona, que se hallaba en funciones de Guardia.
