El Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga reconoce que autorizó la utilización de "un único vehículo" del parque de Vélez-Málaga, la Bomba Urbana Ligera (E22) de primera salida, para recoger al novio en la rotonda del Centro Comercial El Ingenio y llevarlo hasta la explanada del parque acuático Aquavelis, donde se encuentra el establecimiento en el que se celebró la boda del bombero, el pasado 14 de mayo. La versión de la Diputación de Málaga, ente al que pertenece el consorcio, añade que el recorrido acordado apenas llegaba a los 500 metros con los que sus compañeros querían homenajearle, "como es frecuente y tradicional en los cuerpos de bomberos de todo el mundo". "Era una boda con unas circunstancias familiares especiales y se autorizó ese uso de la imagen corporativa a un profesional que se siente orgulloso de ser bombero y para que en un día especial pudiera dar muestra de ello". En su explicación, centrada más en lo que se autorizó que en lo que ocurrió, insisten en que estas escenas se producen en los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad "con relativa frecuencia".

Sin embargo, la denuncia de Julián Moreno, delegado del sindicato Unión Sindical Obrera (USO), describe un panorama muy diferente que, según dice, han creado una mezcla de "estupor e indignación" en la plantilla. Moreno ha terminado trasladando los hechos a la Fiscalía al entender que se hizo un uso indebido y abusivo de los medios públicos de extinción de incendios. En un detallado informe que sugiere una posible malversación, desarrolla que el E22 no sólo se utilizó para recoger al novio y dos familiares en Málaga capital y llevarlo hasta el punto de la celebración (ida y vuelta son 60 kilómetros), sino que en el parking que comparten el establecimiento y el recinto acuático de Torre del Mar se celebró una exhibición en la que participaron un total de cuatro vehículos oficiales del parque de Vélez-Málaga. Además del E22, de cuyo traslado se encargaron agentes fuera de servicio, el documento señala que a la celebración se sumó una autoescala, una nodriza cisterna y una pick-up conducidos por tres de los cinco agentes que ese día sí cubrían la guardia. La Diputación no ha negado ninguno de estos puntos. La denuncia adjunta la misma fotografía que ilustra esta información, en la que se distinguen los vehículos, entre ellos la autoescala con la escalera desplegada, y asistentes a la boda que disfruta de la flota.

El documento insiste en la gravedad que supone usar medios públicos de extinción de incendios para asuntos privados y el riesgo que supone ante una posible emergencia. Destaca que, ante un suceso importante, ya sea en el municipio veleño o en otro punto de la Axarquía, el tiempo de respuesta de los agentes que ese día estaban de servicio se habría disparado. Argumenta que la escala tarda varios minutos en replegarse y los bomberos que participaban en el acto habrían tenido que regresar al parque para recoger a los otros dos agentes que completaban la guardia para salir de nuevo. Un recorrido extra de cuatro kilómetros.

Sobre si la operatividad del parque se vio comprometida con tantos vehículos fuera del mismo, la versión oficial es ambigua, pero tampoco lo rechaza. Aseguran que el director técnico del CPB dijo en su momento que la salida de "uno" de los más de 10 vehículos con los que cuenta el parque para el recorrido autorizado (500 metros) "no entorpecía ni dificultaba en ningún caso la operatividad y el servicio del día, que estaban garantizados en todo momento al 100%". Pero salieron cuatro. Preguntadas por si este despliegue de medios técnicos y de personal supuso el incumplimiento de la autorización inicial y si podría deducirse alguna infracción del régimen disciplinario, las fuentes de la Diputación han eludido la respuesta.