Nueva agresión grave en el interior de un piso tutelado por la Administración y gestionado por una oenegé en Zaragoza. Un joven senegalés fue apuñalado en el pecho por otro de origen marroquí con el que compartía piso. Ambos discutieron cuchillo en mano, siendo detenidos ambos. El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón se hizo cargo de la investigación para determinar las causas que rodean el caso. 

La voz de alarma la dieron el resto de hombres que residen en el interior de un piso del número 14 de la calle Santander, en el zaragozano barrio de Delicias. Eran las 13.30 horas. Nerviosos y preocupados ante la posibilidad de que pudiera ocurrir una tragedia, llamaron a la sala del 091 avisando que en el interior del domicilio se estaba produciendo una pelea entre dos jóvenes que iban armados con cuchillos de cocina. 

De forma inmediata se desplazaron hasta allí varias patrullas de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional que al llegar vieron que los dos jóvenes, de 23 y 36 años, presentaban heridas de arma blanca, especialmente uno de ellos que tenía un corte a la altura del pezón izquierdo. 

Realizaron las primeras asistencias a la espera de que llegaran los sanitarios que trasladaron a los dos jóvenes a sendos hospitales, aunque en calidad de detenidos, tal y como confirmó a El Periódico de Aragón, la Jefatura Superior de Policía de Aragón. Los delitos son el de tentativa de homicidio y lesiones, respectivamente, ya que el agresor presentaba lesiones de menor índole. Los cuchillos fueron intervenidos para su posterior análisis por parte de la Brigada Provincial de Policía Científica. 

Cuando se recuperen de las heridas, los investigadores les tomarán declaración previo a ser puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 12 de Zaragoza, en funciones de guardia.

Justo hace una semana

Este viernes hace una semana tuvo lugar una agresión similar en otro piso de refugiados, este en San José. Una taza rota a modo de arma blanca fue el instrumento que un hombre empleó de madrugada para zanjar una discusión con otro. Fue detenido e ingresó en prisión como supuesto autor de un delito de homicidio en grado de tentativa. 

La pelea se originó en el interior de la vivienda, después de que todos ellos regresaran de la calle donde habían estado consumiendo importantes cantidades de alcohol, salvo el agresor. La pelea se inició primero con las manos, si bien en un momento dado, según los testigos, H. B., marroquí de 31 años, cogió un cuchillo del cajón de la cocina mientras agarraba a la víctima. Ante ello, el resto de jóvenes se abalanzaron sobre ambos para separarlos y para arrebatarle el cuchillo. Lo consiguieron no sin antes recibir un fuerte golpe en la cara otro de los jóvenes.

Era tal la agresividad que presentaba H. B., que otro de los allí presentes decidió coger un extintor y rociarle con la espuma para evitar que se iniciara otra pelea. Duró poco puesto que acudió a la habitación de la víctima y se inició otra pelea. En esta ocasión no fue con el cuchillo empleado anteriormente, sino con un trozo de una taza, tal y como adelantó este diario, con el que le rajó la espalda de arriba a abajo. Ante tal agresión, los seis hombres que estaban observando todo bajaron a la calle a pedir ayuda con la suerte de que una patrulla de la Policía Nacional pasaba allí. Fueron estos agentes los que asistieron a la víctima, que estaba inconsciente en el rellano de la vivienda, y detuvieron a H. B.