El abogado de la madre de las niñas Olivia y Anna, José Manuel Niederleytner, planteó en la jornada de ayer la necesidad de tener prudencia a la hora de responsabilizar a la que era pareja de Tomás Gimeno en el momento de los hechos de la tragedia ocurrida. Y es que ayer se planteó en algunos medios que esta mujer sabía desde las 17:20 horas que el padre se iba a marchar con las pequeñas y no avisó a Beatriz Zimmermann ni a las fuerzas de seguridad. Sobre este asunto, el letrado, que es el decano del Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife, cree que «hay que tener mucho cuidado» con estos planteamientos. Desde su punto de vista, en caso de que se hubiera producido una inacción voluntaria «la magistrada hubiera ordenado su detención como presunta autora de un delito de encubrimiento».

Para José Manuel Niederleytner, en estos días se hacen «conjeturas en las que no merece la pena entrar». Este profesional de la Abogacía ejerce la asistencia jurídica a Beatriz Zimmermann desde el comienzo del caso. Cabe recordar que Tomás Gimeno no entregó a sus hijas a la progenitora el 27 de abril, pues ese mismo día las asesinó en su vivienda de Igueste de Candelaria y después las tiró al mar en una zona donde la profundidad es de 1.000 metros. Y hasta ahora solo ha aparecido el cadáver de Olivia.

Sobre la previsión de que el buque oceanográfico Ángeles Alvariño finalice su labor de rastreo del fondo marino durante la noche del miércoles y se incorpore a otras campañas que estaban en su agenda de servicios, Niederleytner considera que «es una cuestión muy técnica que corresponde decidir a quienes dirigen la investigación». Respecto al limitado tiempo que resta para que el barco abandone las aguas de Tenerife y la inspección submarina, con el riesgo de que la búsqueda quede frenada durante meses o años, el abogado señala que «sería deseable que aparecieran los cuerpos antes, pero es algo que no está en nuestra mano».

«Sería deseable que se respete la voluntad de la madre en los términos en los que ella los expuso en la carta» que se divulgó el pasado domingo y el lunes, aclara este profesional de la Abogacía.

Tercera prórroga

La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, confía en que los dos días que quedan por delante, antes de que finalice la «tercera prórroga» de las labores de rastreo en busca de Tomás Gimeno y su hija de un año, Anna, sirvan para «arrojar más luz» sobre lo ocurrido. «Mantenemos el ánimo y la ilusión de poder encontrar el resto de los indicios que nos permitan dar por cerrado un capítulo que es tremendamente doloroso y que nos tiene a todos compungidos al ver hasta que extremo puede llegar la violencia vicaria», destacó. La directora del Guardia Civil agradeció la colaboración del Instituto Español de Oceanografía mediante el buque Ángeles Alvariño, en el marco de la investigación judicial abierta tras la desaparición de Tomás Gimeno y sus dos hijas y que ha permitido encontrar hasta el momento el cadáver de la mayor.

Gámez agradeció la labor de las casi treinta personas de la tripulación y la de los efectivos del Instituto Armado que «conviven y trabajan con ellos». «Han estado trabajando sin descanso, 24 horas al día, desde el pasado 30 de mayo», valoró.

María Gámez explicó que, según el auto dictado el pasado sábado por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Güímar, cuando la madre de las niñas denuncia que Tomás Gimeno no le ha devuelto a sus hijas, «ahora lamentablemente sabemos que el asesinato había tenido lugar horas antes». E incidió en que cuando se produjo la primera declaración de la madre de las niñas, en un primer momento solo se trataba de la «no entrega, por parte del padre, de las niñas a su madre» y «no se podía conocer ninguno de los hechos que lamentablemente después de la investigación se han sacado a la luz».

Confianza

«Tenemos confianza en que en estos dos días que quedan por delante para arrojar más luz sobre la desaparición del padre y de la otra hermana», señaló, apuntando que «la Guardia Civil no da por terminado un caso hasta que no se tienen las pruebas concluyentes».