Este lunes, el tráfico en las inmediaciones de la Gran Vía se colapsó desde pasadas las 14.00 horas de este lunes debido a que los bomberos del Ayuntamiento de Madrid y personal del Samur-Protección Civil estaban trabajando para tratar de bajar a un hombre que ha subido a una azotea con intención de lanzarse al vacío. Esta situación ha provocado el corte de la circulación en vías adyacentes a Gran Vía.

Los efectivos desplazados han conseguido tras más de hora y media de negociación que esta persona depusiera su actitud y accediera a bajarse. Pasadas las 15.30 horas, los sanitarios del Samur le han valorado para trasladarle a un centro hospitalario, según han informado fuentes de Emergencias Madrid.

La intervención se ha realizado en un edificio ubicado en el número 80 de la Gran Vía, en una decimoquinta planta del inmueble que alberga un hotel, en cuya cúpula se encamaraba el hombre.

Una de esas personas que lograron salvar la vida al joven es el bombero protagonista de esta historia. Tras la tensión y nervios ante el suicidio inminente del joven, este bombero se derrumbó y comenzó a llorar tras verle a salvo, según informó La Sexta en las imágenes mostradas sobre lo acontecido.

Todo acabó bien y pudo ser salvado y trasladado al Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz. Este bombero es una muestra de la profesionalidad del cuerpo y cómo, aunque a veces son lo parezcan, no dejan de ser seres humanos.