Gran Canaria entra hoy en el nivel 4 de alerta sanitaria, en el que permanece Tenerife, y la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias pide a los ayuntamientos de ambas islas que colaboren en el cumplimiento de las nuevas medidas de prevención, que incorporan varios cambios en las restricciones debido a los autos del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) sobre algunas normas para las islas en los niveles de alerta 3 y 4.

La subida de Gran Canaria a la máxima escala de riesgo coincide, sin embargo, con un descenso continuado en el número de casos de coronavirus en el conjunto del Archipiélago, que en la última semana ha disminuido un 23,6%. La jornada de ayer registró 478 nuevos contagios, su cifra más baja desde el 11 de julio –cuando se computaron 409–, y que además se traduce en 148 positivos menos con respecto al domingo pasado, cuando se notificaron 626 contagios. En la jornada anterior a esta última, los casos diarios en Canarias rozaban el millar, con 947 contagios.

A este respecto, la isla de Tenerife, que hasta ayer encabezaba el número de contagios a escala regional desde hace más de dos meses, ha logrado reducir su cómputo de casos diarios en más de un 20% y ayer se situaba por debajo de los 200 casos por primera vez en muchas semanas, con 197 nuevos positivos en un día y un fallecimiento como consecuencia de la Covid-19. En cambio, Gran Canaria superaba ayer a Tenerife con 237 nuevos positivos en 24 horas y cuatro decesos. Aun así, también la tendencia en la isla es hacia la baja dado que, una semana atrás, llegó a superar los 300 casos.

El fallecimiento notificado en Tenerife ha sido de una mujer de 86 años, asociada a un brote familiar; mientras que los fallecimientos de Gran Canaria se corresponden con tres mujeres de 88, 86 y 83 años, esta última vinculada a un brote familiar, y un varón de 62. Todas estas personas padecían patologías previas y permanecían ingresadas en el hospital.

El total de casos de coronavirus acumulados en Canarias es de 85.166 y 16.018 permanecen activos, de los cuales 95 están ingresados en UCI y 472 permanecen hospitalizados. Este escenario límite de saturación hospitalaria, la más elevada desde la etapa del confinamiento, es una de las razones por las que las dos islas capitalinas comparten el máximo grado de alerta sanitaria.

Medidas

Así, Sanidad ha remitido a la Federación Canaria de Municipios la tabla que recoge las nuevas medidas en vigor y que exige «el cierre de espacios públicos susceptibles de aglomeraciones y de celebración de botellones», tal como indica en el bloque normativo referido al ocio nocturno. En este se establece la clausura de estos espacios en horario nocturno, antes de las 22:00 horas. No está permitida la venta ni el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública, parques o zonas de esparcimiento al aire libre, toda vez que se reforzarán los controles para impedir el consumo de alcohol y otras actividades no permitidas en la vía pública, parques y plazas, pudiendo establecerse, incluso, el cierre nocturno de espacios en los que se produzcan aglomeraciones por esta causa.

Asimismo, los ayuntamientos deben precintar mobiliario urbano infantil y de uso deportivo. En cambio, la situación de los mercadillos en la vía pública no está sujeta a autorización sanitaria, por lo que los ayuntamientos deben establece el aforo máximo de los mercadillos y de cada uno de sus puestos, así como los requisitos de distancia entre puestos y las condiciones de delimitación del mercado. Se recomienda que los puestos dispongan de un pasillo frontal para la circulación de los clientes de 4,5 metros de ancho. Y en el caso de puestos enfrentados, el ancho de esta vía será de 6 metros. Entre estos debe haber una distancia mínima de dos metros, salvo que estén separados físicamente.

Con todo, una de las grandes controversias de la nueva normativa es la que se corresponde con la limitación de horarios a los servicios y establecimientos de hostelería, donde Sanidad decreta el cierre total entre las 00:00 y las 06:.00 horas para todos los niveles de alerta sanitaria en las islas, mientras que el auto 249/2021 de 29 de julio de 2021 del TSJC, interpuesto por la asociación Hostelería Unida de Tenerife (HUT), certifica la suspensión de esta norma.

Pese a esta maraña de medidas que, aun así, es menos restrictiva con respecto a las normas impuestas a comienzos de este año, su cumplimiento es esencial para contener la curva de contagios en Canarias y Sanidad apela, una vez más, a la responsabilidad individual y colectiva para evitar la expansión del virus por el Archipiélago. Sobre todo, de su variante Delta, la predominante en Canarias, que acapara más del 80% de los casos y es mil veces más contagiosa que la cepa original. En este sentido, la vacunación, unida a la rutina cotidiana de medidas de prevención, se erigen en el mejor arma contra la propagación del virus.

En cuanto a la situación de las islas, El Hierro es, actualmente, la única que se encuentra en el nivel 1; le siguen La Gomera, Lanzarote y La Graciosa en el nivel 2; La Palma y Fuerteventura en el nivel 3; y Tenerife y Gran Canaria en el nivel 4. Por islas, Tenerife sumó ayer 196 casos, con un total de 41.073 casos acumulados y 9.307 activos; Gran Canaria cuenta con 32.336 acumulados, 237 más, y 5.927 activos. Por su parte, Lanzarote suma 17 positivos, con 6.261 acumulados y 163 activos; Fuerteventura tiene 3.684 casos acumulados, con 23 más que la jornada anterior, y 506 activos. La Palma suma dos casos nuevos, por lo que cuenta con 1.001 acumulados y 73 activos; El Hierro suma un nuevo caso, por lo tiene 430 acumulados y 12 activos, mientras que La Gomera, con dos casos nuevos, tiene 377 acumulados y 28 activos.

La Incidencia Acumulada a los siete días en las islas se sitúa en 203,73 casos por cada 100.000 habitantes y, a los 14 días, en los 457,64 casos por 100.000 habitantes. Hasta ayer se han realizado 1.889.394 pruebas diagnósticas, de las que 5.524 se corresponden con la jornada anterior.