El delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, ha afirmado que la Guardia Civil sigue "luchando" para que se haga justicia con Yéremi Vargas, el niño de 7 años cuya pista se perdió hace casi trece años cuando jugaba en un descampado cerca de su casa en la localidad de Vecindario, en Santa Lucía de Tirajana (Gran Canaria) aunque ha dicho que por ahora no hay novedades en el caso.

Precisamente, este martes, 10 de marzo, se cumplirán trece años desde que fuera visto por última vez, mientras que el principal sospechoso de los hechos, Antonio Ojeda, conocido como el Rubio, que permanece en prisión por la agresión sexual de otro menor en el año 2012, está a punto de cumplir condena.

"Los casos, mientras no haya un responsable, se siguen manteniendo abiertos y sigue la investigación en la medida en la que puedan aparecer nuevos indicios", dijo este miércoles en declaraciones a los medios de comunicación.

Pestana comentó que la Guardia Civil, al no tener un responsable al que se le haya podido encausar ni pruebas suficientes para que un juez active el procedimiento judicial correspondiente, sigue "luchando" para que se haga justicia en este caso.

Cuestionado sobre si existe alguna novedad en este asunto, el delegado del Gobierno apuntó que por ahora no, pero insistió en que se sigue trabajando para dar luz al caso.