Es difícil recordar una intervención pública del alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga, en sus más de 32 años de mandato en la que no haya hecho una defensa a ultranza del turismo, como actividad económica en sí misma, pero también como posibilidad de desarrollo para los lugares en los que se desarrolla. Y ese planteamiento inquebrantable lo ha hecho hasta en aquellos momentos en los que algunos sectores universitarios han criticado el modelo de crecimiento aplicado en el sur de Tenerife. Ayer no fue una excepción durante el acto protocolario de inauguración del Grado de Turismo de la Universidad de La Laguna en Adeje.

El regidor señaló que actualmente el campus de su municipio funciona como sede semipresencial, "pero aspiramos a uno presencial", así como "a la investigación, a un observatorio de análisis y sentido crítico, real y profesional". En ese sentido, Rodríguez Fraga demandó la importancia de disponer de estos recursos de estudio y "que no se digan ocurrencias para ocupar papel en el circo mediático".

En el marco del exconvento franciscano de la villa adejera, el alcalde defendió, una vez más, la importancia de la formación en un sector en el que se requiere inteligencia para garantizar el desarrollo económico, medioambiental y social de los destinos. Tras hacer referencia a la "situación crítica" que se abre con la quiebra del turoperador Thomas Cook, Rodríguez Fraga lanzó un mensaje de ilusión, de compromiso y de esfuerzo conjunto para superar la coyuntura. Explicó que el turismo "nos ha dado el mejor bienestar de la historia, desarrollo y la mejor distribución de la riqueza", sobre todo "en los sures de las islas, los territorios más olvidados y abandonados".

La rectora de la Universidad de La Laguna, Rosa María Aguilar, agradeció al personal del Ayuntamiento y de la Universidad, así como al alumnado, el esfuerzo desplegado para hacer que el proyecto del Grado en el Sur sea una realidad y recordó que se está trabajando para potenciar la docencia en dicho campus. En el octavo curso del Grado de Turismo figuran inscritos 120 alumnos, según los datos que trascendieron en el evento de ayer.

Aguilar se encargó de ofrecer la lección inaugural, donde defendió el adecuado procesamiento de los datos, a través de la inteligencia artificial, para poder ofrecer un producto turístico específico a las demandas de cada cliente. Aguilar expuso que elementos como "el internet de las cosas o los procesos de big data han cambiado la forma de comunicarnos con el usuario".

Empresas 4.0

Aseguró que "en las empresas turísticas 4.0 el cliente está en el centro de la organización", en la medida en que cada vez más demanda "experiencias únicas" y exige "un producto específico y personalizado". En opinión de la rectora, a través de cualquier canal (redes sociales, chats o correos electrónicos, por ejemplo), el turista ha transformado "nuestras normas de negocio". Apuntó que en la inteligencia artificial, "nuestro valor son los datos", así como el interactuar con el mundo y tomar decisiones.