Cierre de los carriles de acceso a Santa Cruz de Tenerife por las obras de la depuradora

Los trabajos se realizarán en la zona de Buenos Aires, en la entrada a la ciudad desde la autopista del Norte

Las principales afecciones al tráfico se producirán desde principios de julio

Zona de la capital que se verá afectada por las obras de la depuradora.

Zona de la capital que se verá afectada por las obras de la depuradora. / E. D.

El avance de las obras de ampliación de la depuradora de Buenos Aires, en Santa Cruz de Tenerife, provocará el cierre de los carriles de acceso a la ciudad desde la autopista del Norte (TF-5), en la zona más próxima a la Refinería. Las principales afecciones al tráfico, según informa el Ayuntamiento chicharrero, a través del área de Seguridad y Movilidad, comenzarán a partir de los primeros días de julio, aunque ya desde el domingo 25 de junio se realizarán trabajos de señalización. El Consistorio anuncia que se instalarán semáforos temporales para reconducir la circulación de vehículos mientras duren los trabajos en dicha zona.

La obra de ampliación y remodelación de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) del municipio capitalino, que ejecuta el Gobierno central para poner fin a los vertidos al mar en Santa Cruz, y que supone una inversión de 18 millones de euros, comenzaron en marzo de 2020. El proyecto entra ahora en la fase de los trabajos de canalización, que se ha dividido en tres tramos y que sí notarán los ciudadanos. La previsión es que dicha fase finalice en la primera quincena del mes de septiembre.

El Consistorio indica que el domingo 25 de junio se llevarán a cabo labores de señalización

Durante la ejecución de los trabajos correspondientes al primer tramo, además del cierre de los carriles de acceso a la ciudad desde la TF-5, también se suprimirá el sentido descendente de la circulación de vehículos de la avenida Mnauel Hermoso Rojas,, desde su intersección con la citada autopista y la calle Álvaro Rodríguez López, "por lo menos hasta la zona de la calle Clara Campoamor". Esta última vía tendrá únicamente sentido descendente para "facilitar el desahogo del tráfico por ese punto". Durante los primeros días, habrá presencia policial en la zona.

El Ayuntamiento indica que durante la ejecución del primer tramo de esta fase, que terminará, según las previsiones, a finales de julio, se ha propuesto que los vehículos procedentes de la TF-5 utilicen la calle Álvaro Rodríguez López hasta su destino, o que "se incorporen posteriormente a la avenida Manuel Hermoso Rojas desde esa vía y utilizando la calle Clara Campoamor". El tráfico procedente del barrio de Buenos Aires accederá a la ciudad desde los carriles interiores de la autopista del Norte no afectados por las obras y podrán tomar la ruta ya apuntada anteriormente. "Se ha previsto facilitar los accesos necesarios a las instalaciones de la Refinería por la zona de obras".

El área de Movilidad informa de que se instalarán semáforos temporales para reconducir el tráfico

El segundo tramo está previsto que se desarrolle durante el mes de agosto y cuenta también con un plan de tráfico específico que "permita hacer compatible los trabajos con la circulación de vehículos". Por último, el tercer tramo se ejecutará entre agosto y la primera quincena de septiembre, con el objetivo de que "al inicio del próximo curso escolar y la vuelta del período estival, las afectaciones sean las menores posibles al tráfico de la ciudad".

Esta fase del proyecto de ampliación de la depuradora consiste, principalmente, en la colocación de un gran tubo de conexión desde la Estación de Bombeo de Aguas Residuales (EBAR) de Cabo Llanos hasta la EDAR de Buenos Aires, lo que provocará el levantamiento de la vía de penetración de la capital por la avenida Manuel Hermoso. La tubería se instalará en el subsuelo, por lo que se tendrá que realizar una gran zanja y llevar a cabo complicados trabajos de alineación para que en el futuro no se produzcan fugas.

Antecedentes

La necesidad de ampliar la depuradora de Buenos Aires data prácticamente desde su construcción, en los años 70, cuando ya se consideró insuficiente para el tratamiento del volumen de aguas residuales que recibe no solo del municipio capitalino, sino también de La Laguna y de El Rosario. Tras varios proyectos fallidos en cerca de tres décadas, por fin, esta esperada actuación recibió el respaldo del Estado y la financiación necesaria. La obra de la ampliación de la depuradora de Santa Cruz fue adjudicada en 2019 a la unión temporal de empresas (UTE) formada por Joca Ingeniería y Construcción y Construcciones Alpi. Los trabajos comenzarán en 2020 y aún se desconoce la fecha de finalización

Para el Ayuntamiento, se trata de una de las actuaciones más importantes para la capital tinerfeña, pues será la clave para poner fin al problema ambiental que sufre el municipio chicharrero por el vertido de aguas residuales al mar. Diariamente, y debido a que la planta depuradora ya no tiene capacidad, pues recibe el agua de Santa Cruz, de La Laguna y de El Rosario, se vierten al mar unos 25.000 metros cúbicos de aguas residuales. La ampliación permitirá doblar la capacidad de tratamiento de la planta de los 26.174 metros cúbicos diarios actuales hasta los 55.000 futuros. Asimismo, se eliminarán los malos olores que sufren los vecinos de la zona.