Titsa (Transportes Interurbanos de Tenerife), empresa del Cabildo, ha comprado al Ayuntamiento de Santa Cruz, por 2,4 millones de euros, los terrenos que ocupa en Cuevas Blancas. El acuerdo alcanzado entre la Corporación insular y el Consistorio chicharrero "acaba con la situación de irregularidad que se arrastraba desde hace 20 años, debido a que los talleres y la sede de la compañía de guaguas se construyeron en unos solares que pertenecían a la capital". Así lo ha manifestado el vicepresidente del Cabildo y presidente de Titsa, Enrique Arriaga (Cs), quien destaca la importancia de esta adquisición.

Las escrituras de compraventa ya han sido firmadas por el propio Enrique Arriaga y por el primer teniente de alcalde en Santa Cruz, Guillermo Díaz Guerra (PP). El vicepresidente del Cabildo declara que para la Corporación insular era "vital" terminar con esta situación de irregularidad. "Es inconcebible el hecho de que se construyera un edificio como el de Cuevas Blancas sin ser propietario de los terrenos en cuestión. Pero, además, durante dos décadas ni siquiera se había regularizado esta situación", añade. Por ello, apunta Arriaga, el Cabildo decidió transferir los fondos necesarios a Titsa para que se pudiese ejecutar esta operación de compraventa. Resalta que con la adquisición de estos terrenos, la compañía de guaguas aumenta su solvencia ante terceros, "al poder contar con todos sus activos".

Por su parte, Guillermo Díaz Guerra, también concejal de Urbanismo, manifiesta que esta venta supone un ingreso para el Ayuntamiento de Santa Cruz por venta de patrimonio público de suelo. En este sentido, y lógicamente, añade el edil, el dinero obtenido irá destinado a cualquiera de los supuestos que recoge la Ley del Suelo. Entre éstos se encuentra la posibilidad de mejorar el parque de viviendas de protección pública.

Tanto Enrique Arriaga como Guillermo Díaz Guerra valoran la predisposición que hubo entre ambas partes, desde el principio, para llegar a este "acuerdo histórico". Al comienzo de este mandato, y según informa el Cabildo, ambas administraciones comenzaron a trabajar en conjunto para llegar a un acuerdo a través de la tasación del suelo, "estableciendo un precio de venta justo de dichos terrenos, que satisficiera a ambas partes y no causara un quebranto en las arcas de Titsa".