El alcalde de Santa Cruz, el nacionalista José Manuel Bermúdez, anunció ayer que, aunque ya el próximo año el Carnaval se volverá a celebrar en febrero, el Ayuntamiento no descarta también «hacerle un guiño» a la fiesta chicharrera en junio. «En 2023, recuperaremos el Carnaval tal y como lo conocemos, y se celebrará en febrero, como siempre. Otra cosa es que podamos llevar a cabo alguna acción puntual en junio, tras el éxito que ha tenido la celebración de la fiesta en verano», matizó el regidor. Bermúdez realizó estas declaraciones durante el evento Encuentros de Economía, celebrado en la Sala de Arte La Recova y organizado por Tiempo de Canarias, durante el cual el primer edil y el economista jefe de Tressis, Daniel Lacalle, dialogaron sobre Desarrollo e Inversión en la capital tinerfeña.
En 2023, el Carnaval de Santa Cruz de Tenerife arrancará el 20 de enero, con la gala de inauguración de la fiesta, y finalizará el 26 de febrero, con el domingo de Piñata. El alcalde recordó que este año la fiesta chicharrera se ha celebrado en junio, aunque en la calle solo hubo bailes durante un fin de semana, debido a que la pandemia del coronavirus impidió que el Carnaval pudiese llevarse a cabo en febrero. "Aquella decisión fue un acierto, porque el traslado de la fiesta ha supuesto una importante inyección económica para la ciudad", apuntó.
