Tres meses le han bastado a la concejala delegada del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS), Rosario González, –desde que dictó la providencia, el 26 de abril– para resolver una demanda histórica de las personas con discapacidad y aprobar las bases de ayudas individuales, después de más de cinco años de espera y anuncios. Además, el texto propuesto fue respaldado de forma unánime por los miembros de la mesa técnica de la discapacidad.

Entre los hitos más relevantes, la inclusión de los menores sin que puedan tener aún el certificado de discapacidad. Para González, «es vital una atención temprana y sabemos los problemas que hay para las resoluciones; el ayuntamiento ya puede tramitar las ayudas y es un gran avance».

El documento incluye a menores de 18 años que no cuenten aún con el certificado de discapacidad y tengan un diagnóstico médico que indique la existencia de síntomas de algún tipo de discapacidad y de escasos recursos económicos. En estos casos, podrán beneficiarse a tratamientos, terapias, utensilios, sistemas de movilidad y aquellos estímulos imprescindibles para mejorar la calidad de vida de los niños de Santa Cruz.

La responsable del IMAS también destaca la «simplificación de los expedientes de los arreglos en los horas. «Era punto delicado y que el colectivo reclamaba mucho, ya que se tardaba una media de más de un año en resolver los expedientes», explica la edil.

Junto a la simplificación de los trámites en aras de mejorar la calidad de vida desde el Ayuntamiento, la responsable del IMAS muestra su satisfacción porque las modificaciones administrativas están acompañadas de más personal para el área de discapacidad, lo que redundará en una atención más cercana y más agilidad administrativa de los expedientes.

La responsable del IMAS asegura que «estamos dando un gran impulso a la discapacidad con la modificación de las bases de las ayudas y con el apoyo del personal», pues se viene a dar respuesta, a su vez, a una demanda histórica de este colectivo, reconoce.

Mejoras concretas

El nuevo documento consensuado suprime la obligatoriedad de presentar la resolución del grado de dependencia, o solicitud de haberlo presentado, lo que se había constituido en un obstáculo para la tramitación de las ayudas.

También se ha agilizado y simplificado el trámite necesario para las ayudas de eliminación de barreras físicas en la vivienda, pues no serán necesarios ya que los presupuestos estén sellados y firmados, ni se condicionará a las visitas domiciliarias, sino que vale con que Sinpromi realice el croquis con el informe técnico. Mientas, la obra es responsabilidad del beneficiario, que gestionará la correspondiente licencia ante la Gerencia de Urbanismo.

Tampoco será preciso presentar la prescripción médica para optar a las ayudas de equipamiento adaptado básico del hogar y electrodoméstico, que valdrá con el informe de la trabajadora social.

En las ayudas básicas de movilidad y accesibilidad se incorpora la señalización vertical y horizontal de carácter particular para aparcamientos con movilidad reducida y se permite la obtención del permiso de conducción a otros tipos de discapacidad, no solo a aquellos con graves problemas de movilidad. También el IMAS atenderá la demanda de ayuda para actividades culturales, de ocio y tiempo libre y se amplía la ayuda complementaria de asistencia fuera del término municipal de Santa Cruz.

Además, se elimina la obligatoriedad de relación directa entre necesidad discapacidad y necesidad de tratamiento bucodental, que será valorado desde el IMAS según prescripción médica.

El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, afirma que «la modificación de las bases para las ayudas a la discapacidad suponen atender, por fin, una demanda muy esperada por las asociaciones de la las personas con algún tipo de discapacidad» y argumenta que «no es casualidad que se haya producido cuando por primera vez tenemos en manos de CC la Concejalía de Acción Social, con Rosario González, de profesión trabajadora social, al frente».

Frente a la valoración política, la reacción en primera persona de los beneficiarios. «Para Queremos Movernos, la modificación de las bases de las ayudas individuales para personas con discapacidad, recientemente aprobadas, tienen una calificación muy buena. Se ajustan a lo solicitado por todas las asociaciones que formamos parte de la Comisión Técnica de Discapacidad del IMAS. Se trata de unas bases consensuadas con las asociaciones y que dan respuesta a las necesidades con las que se pueden encontrar las personas con discapacidad y sin recursos. Cubren necesidades en el ámbito de la salud, la formación, las necesidades en el hogar, las ayudas técnicas... Muy pocos ayuntamientos cubren un abanico tan amplio de necesidades», explicó la portavoz del colectivo Ana Mengíbar.

La valoración de Mengíbar

«Algo que nos congratula es que las modificaciones contemplen la atención a los niños con discapacidad de inmediato, aportando informes médicos y no teniendo que esperar a obtener la calificación de la discapacidad para recibir las ayudas. Este es el punto que más valoramos dentro de las nuevas bases. Asimismo valoramos que ya no se tenga que obligar a los solicitantes a tramitar la dependencia, un grave error que tenían las antiguas bases. La atención a los niños con informes médicos y la eliminación del imperativo de tramitar la dependencia fueron dos reclamaciones históricas de Queremos Movernos y que vemos materializada. A pesar del tiempo transcurrido y la lentitud en la tramitación de la modificación, cuando se nos ha comunicado a la Comisión Técnica la aprobación de la modificación la hemos aplaudido las asociaciones», precisó Mengíbar.