La fundación que preside ha tasado en 45 millones de euros el ‘Monumento a Franco’ que su padre construyó en la capital tinerfeña. El arquitecto Juan de Ávalos Carballo defiende que los valores artísticos de esa obra están por encima de las connotaciones sociales que la envuelven. “Mi padre no era franquista”, dice.

Un informe realizado a partir de una tasación del profesor Javier Morales Vallejo valora en 45 millones de euros el ‘Monumento del Ángel’ de Santa Cruz de Tenerife.

El arte tiene un valor aleatorio y ese informe al que usted hace referencia se hizo a partir de la recuperación y posterior restauración de los moldes de la obra de mi padre que estaban bastante mal conservados, por no decir abandonados, en un solar de Mérida. El precio de una pieza lo marca el mercado y ahora mismo no estamos en un periodo bueno porque parece que todo vale, especialmente, en el campo de la pintura...

...sí, el mercado es así de imprevisible, ¿pero usted está seguro de que ese es el precio real de este conjunto escultórico?

La escultura de un autor prestigioso aumenta de valor si se dispone del original y de sus moldes. Si eso es así se pueden llegar a obtener hasta siete copias del original con el mismo valor y otras dos que se denominan pruebas de autor algo más económicas. Esa producción tiene que estar autentificada por sus herederos o por una fundación, es decir, que cuando hablamos de cuatrocientas esculturas en realidad podemos estar hablando de cuatro mil. En el caso del Monumento del Ángel debo decir que los “problemas” que envuelven a ese conjunto escultórico están aumentando su popularidad de una manera desorbitada.

¿Vamos, que lo más que interesa en este caso es que se hable de la obra sin tener en cuenta si se hace para bien o para mal?

De una obra de mi padre siempre voy a hablar bien, pero es evidente que cuantas más referencias se hagan de ese monumento, más crecerá la nebulosa de fama alrededor de este gran proyecto.

¿Usted conoce bien esa obra?

Mucho... Yo estaba estudiando arquitectura cuando mi padre me pidió que le echara una mano en la ejecución de los planos. Franco le exigió que eliminara del proyecto cualquier simbología belicista que hiciera referencia a la victoria en la Guerra Civil...

...pero esas connotaciones son más que evidentes y, además, la obra de Juan de Ávalos logró sus mayores niveles de popularidad durante el franquismo.

Yo soy arquitecto pero, a su vez, tengo algunas experiencias en el campo de la escultura y de la pintura. Si a eso se suma los años que tengo sobra decir que debo ser fiel a mi verdad. Mi padre no fue franquista. En casa nunca existió esa tradición pero, quizás, por todo lo que he vivido esté yo mucho más cerca de esos pensamientos de lo que lo estaba mi padre.

¿A qué se refiere?

Que yo prefiero una democracia controlada por unos tecnócratas que por unos vividores de la política... Que el Ángel que está en Santa Cruz pueda ser interpretado como un símbolo de la victoria es una cuestión de sensibilidades.

¿Pues mucha gente lo cree?

De verdad que es un problema de formación y de sensibilidad, es decir, una obra de arte puede gustar más o menos pero lo que hay que hacer sí o sí es respetar todas las opiniones. A mí, por ejemplo, no me gusta nada el Guernica de Picasso. Para mí es un bodrio, pero lo respeto porque me gusta el Pablo Picasso que veo en otras obras.

¿Todo este debate se reduce a una cuestión de gustos?

No, también puedes pasarte la vida remoliendo la historia para proclamarte socialista y solidario. A mí no me gusta el rock duro y por eso no voy a esos conciertos, pero sí me agradan mucho los toros, entonces la que no va a la plaza es mi mujer porque ella no soporta las corridas de toros.

¿Comprende el enfrentamiento que crean este tipo de representaciones artísticas?

¿Tenemos que demoler el Coliseo de Roma porque Adriano trajo a doce mil esclavos de Egipto para que trabajaran día y noche en su construcción?, ¿dinamitamos el Monumento de los Inválidos dedicado al genocida Napoleón que solo en España mató a más de trescientas mi personas?, ¿derribamos las estatuas de los emperadores romanos que cometieron mil atropellos?... Insisto, este es un problema de formación. El hecho de que yo sea atlético no supone que tenga que odiar de por vida a Sergio Ramos por la faena que nos hizo en el minuto 93. Hay que tener un espíritu deportivo, ¿no?

¿Y no olvidar la historia?

La historia no se puede cambiar ni transformar en base a unos intereses particulares... Lo que ha ocurrido ha pasado y por mucho que lo intenten no hay manera de borrarlo. El general Franco voló desde Canarias (de Gran Canaria a Marruecos) y eso es algo que se puede obviar. Lo siento mucho, pero yo no puedo hacer nada para cambiar el plan de vuelo del Dragon Rapide. Mi padre decía que en la vida no se puede tener dos amores y para él cada escultura era como un hijo. Hay momentos en los que un artista se tiene que entregar a la comercialización para llevar a casa el dinero que necesita la familia. Franco era muy inteligente y quería tener a su lado a las personas que podían solucionarle los problemas independientemente de las ideas políticas que estos tuvieran. Mi padre estaba exiliado en Lisboa cuando él se interesó por primera vez por una de sus obras... Franco sabía que era un rojillo, pero también sabía que era el mejor cuando lo contrató.

¿Entonces usted sitúa el arte por delante de las ideologías?

La mayoría de las veces sí... Mire usted, el Cristo que está en el altar de la Basílica del Valle de los Caídos lo hizo un vasco republicano y separatista que no ha visitado jamás ese lugar para ver cómo quedó su obra. A Franco le gustaba ese Cristo e hizo lo imposible por tenerlo allí. Eso es democracia. Elegir a los mejores porque lo otro es una tiranía.

¿Pero en la época de esplendor de su padre también hubo un buen número de artistas vetados o excluidos por sus ideas?

Pero yo no voy a defender esas decisiones... Estoy cansado y triste de ver un enfrentamiento entre las dos España que algunos siguen fagocitando porque son incapaces de encontrar un equilibrio social para olvidar cuestiones que fueron dolorosas, pero que debemos superar como país. Hoy por ejemplo el Gobierno es incapaz de construir 200 viviendas sociales y en el pasado se edificaron cuatro millones.

¿Qué piensa cuando pasa por delante del ‘Monumento a Franco’ de Santa Cruz de Tenerife?

Que es una obra bien compuesta que exhibe las mejores cualidades de Juan de Ávalos como escultor.

¿Y al leer que alguien le ha arrojado un bote de pintura roja?

Las agresiones artísticas me dan rabia... Antes de cometer esa locura hay que pensar en el proceso artístico y lo que hay dentro de la obra, no en el dictador que la encargó o en los episodios de represión que se vivieron en la época en la que se mandó a construir la escultura. Las agresiones artísticas son la gasolina que reclaman los hooligans para buscar otras obras que destruir al margen si esta es una creación de un rojo o un franquista. Eso se llama vandalismo.

¿Al margen del destino que le pueda deparar al ‘Monumento a Franco’, usted cree que la Ley de Memoria Histórica acabará eliminando todo aquello que huela a Franco, incluido el Valle de los Caídos?

Cuando se mezclan las ideologías políticas con las creencias religiosas los problemas se agravan... Yo no sé lo que acabará pasando con el Monumento del Ángel, que a mí me gustaría que siguiera en el mismo emplazamiento porque es su hábitat natural, pero si quieren tirar el Valle de los Caídos, allí estaré como el chino que se puso delante del tanque en la plaza de Tiananmen. Supongo que este Gobierno, tal y como está España, debe tener ahora mismo otras prioridades. No estamos para perder el tiempo.