La Asociación ONG Abrigos y Sonrisas lidera un original y solidario proyecto que surgió a raíz de una incursión desinteresada en fechas pasadas para mejorar algunas viviendas que estaban deterioradas, propiedad de vecinos de Anaga.

El colectivo que lidera Yone Febles propone el proyecto Construyendo Contigo, que se enmarca en dos objetivos: favorecer la formación e inserción laboral de personas que están siendo atendidas por la asociación al estar en situación de vulnerabilidad y acometer proyectos de adaptación, rehabilitación y arreglos en viviendas de personas sin recursos. Eso sí, como paso previo a la mejora del hogar, serán los técnicos de los servicios sociales municipales quienes verifiquen la necesidad de la intervención tanto por el deterioro de la casa como por la falta de recursos económicos de los demandantes.

En la memoria del proyecto que ha presentado la ONG Abrigos y Sonrisas ante la Dirección General de Derechos Sociales e Inmigración se compromete a que al menos el 15% de los participantes en el proyecto los operarios puedan ser mujeres, precisamente en un sector como la construcción que tradicionalmente ha sido una actividad reservada para hombres, según explica Yone Febles.

También se dará prioridad a las mujeres y a las familias monoparentales que reclamen esta ayuda que está dirigida, inicialmente, en la zona de Anaga. En este distrito la ONG Abrigos y Sonrisas tiene su principal ámbito de actuación, pues hasta ahora su principal actividad es el reparto de alimentos del Banco de Alimentos , del FEGA y a través de recaudación propia. Este colectivo también presta ayuda en la cobertura de biliario y equipamiento para las viviendas, tanto de segunda mano y pequeñas reparaciones de las viviendas de familias o personas que por sus condiciones sociales no cuenta con medios o posibilidades por sí solas para realizaras.

En el estudio de campo realizado por el equipo de Yone Febles se advierte la necesidad de intervenir en viviendas de autoconstrucción, pues es notable la ocupación por parte de personas mayores pensionistas así como en situación de desempleo con dificultades para el acceso al autoempleo en el sector de la construcción y mantenimiento. Aunando las dos necesidades, la ONG plantea atender reparaciones, mantenimiento y adaptaciones de elementos en los hogares que se deterioran o que son preciso intervenir para hacer accesible a sus ocupantes que ven como les limita la calidad de vida.

En paralelo, el proyecto contempla un proceso de elección para los operarios que serían contratados para el programa Construyendo Solidaridad, además se diseñarán y ejecutarán acciones formativas para la implementación del proyecto, como formación y en materia de construcción, reparación y mantenimiento de viviendas a través de unas jornadas de formación en materia de autoempleo.

El proyecto contempla la intervención que redundará en la formación de los profesionales que favorecerá la participación vecinal en la autoayuda en el compromiso solidario en el entorno más desfavorecido, a través del pintado de viviendas, reparto de alimentos, acciones festivas, reciclado de mobiliario para el equipamiento de las viviendas.

En un primer paso, la ONG Abrigos y Sonrisas plantea la contratación de ocho personas, que se podría incrementar hasta los 150 con la puesta en marcha del proyecto y la mediación de los contratados para fomentar las acciones de participación comunitaria con el objetivo de incrementar la participación vecinal en la autoayuda y en el compromiso solidario con el entorno social más desfavorecido.

Por una parte se contratarán técnicos que se encuentren en situación de desempleo y demandantes de trabajo que participen en un proceso de selección que convocará la junta directiva de la ONG, que contará con la asistencia técnica de expertos en la materia.

También se contratarán a albañiles y peones entre personas atendidas desde los servicios municipales de Santa Cruz, para favorecer su reinserción en el mercado laboral y contribuir a paliar su maltrecha economía familiar.

Los beneficiarios de las obras de reforma y mantenimiento portará el dinero par los trabajo y, quienes no puedan sufragar este desembolso, podrán acudir a la financiación municipal, que en ningún caso superará el 10% de la obra a ejecutar.

En total, se prevé la contratación de 150 operarios para intervenir en la reforma de una veintena de viviendas de Anaga, siendo contratadas ocho personas para los trabajos. Para la puesta en marcha se plantea la necesidad de incorporar a un trabajador social, cuatro peones de la construcción, dos oficiales de primera, un arquitecto o aparejador y un coordinador, siendo este último puesto el que no estaría remunerado.

En la actualidad, la ONG oferta su propia sede para la formación, así como un furgón para el transporte de materiales y las herramientas y materiales de la construcción, que se tendrían que ampliar en función de las viviendas a intervenir.

Según reza en el proyecto, el coste total de la puesta en marcha de Construyendo Solidaridad supone un desembolso a la administración de 110.283 euros, a lo que se sumaría otras aportaciones privadas o de la propia entidad, hasta completar un presupuesto final de 114.783,96 euros.